Jefes de importantes tribus yemeníes y decenas de miles de sus hombres anunciaron el sábado que se unían a la revuelta contra el presidente Alí Abdalá Saleh, durante una reunión al norte de Saná, informaron fuentes tribales.

Los jefes de dos de las más importantes tribus del país, con fuerte estructura de clan, la Hached y la Baqil, se apartaron del presidente, en el poder desde hace 32 años, según las mismas fuentes.

Uno de los jefes de los Hached, jeque Husein ben Abdalá Al Ahmar, anunció su “dimisión del Partido del Congreso Popular General (de Saleh) para protestar contra la represión de los manifestantes pacíficos en Saná, Taez y Adén”.

La Hached, considerada la principal tribu yemení, está formada por nueve ramas, como la de Sanhan, a la que pertenece el jefe del Estado.

El anuncio del jeque Husein en la localidad de Amran fue saludado por una multitud de miembros de tribus, como los jefes de la Baqil, la segunda en importancia en Yemen y la más numerosa, según las mismas fuentes.

Los representantes de numerosas tribus estaban presentes durante la concentración que reunió, según fuentes tribales, a decenas de miles de personas, en su mayoría armadas.

La asamblea anunció su apoyo al movimiento de revuelta contra el presidente que comenzó el 27 de enero y se intensificó a partir del 13 de febrero, a gritos de “el pueblo quiere la caída del régimen”, según las mismas fuentes.

El jefe supremo de la tribu Hached, jeque Hamid ben Abdalá Al Ahmar, ya se pasó a la insurrección en su calidad de dirigente del partido islamista Al Islah que anunció esta semana, al igual que las otras formaciones de la oposición, su apoyo a las manifestaciones contra el gobierno.