El defensa Marcelo, convocado por Brasil para el amistoso del miércoles ante Francia, está viviendo su mejor año desde su llegada al Real Madrid, donde se ha hecho con una plaza de titular entre su constelación de estrellas, de la mano del técnico portugués José Mourinho.
Desde su llegada al club de la capital española en 2006, con apenas 18 años, Marcelo ha vivido con una cierta irregularidad el baile de entrenadores de la formación y la llegada continua de nuevas figuras, pero en los últimos meses se ha consolidado como una pieza importante.
Tras no ser convocado por Dunga para el Mundial de Sudáfrica-2010, su gran año ha propiciado su regreso al equipo, a las órdenes de Mano Menezes, de cara al reto de la Copa América de Argentina-2011 (1 julio-24 julio), el próximo gran torneo para la ‘canarinha’.
Marcelo, inicialmente lateral izquierdo, ha dado muestras de su versatilidad y en los últimos años han sido frecuentes sus cambios de posición en el dibujo táctico del equipo, pasando a puestos de interior o extremo izquierdo, según las necesidades del equipo.
El jugador brasileño, de 22 años y muy amigo de la estrella Cristiano Ronaldo, ha mostrado públicamente su gratitud a Mourinho por la confianza y por su nueva consideración dentro del equipo, desde la llegada del portugués antes del actual temporada.
“Mourinho es como un padre para nosotros, alguien que nos defiende, que da la cara por nosotros. Los aficionados de los rivales están contra él porque es alguien que siempre gana”, comentó recientemente en una entrevista con la cadena española de televisión Cuatro.
Con el Real Madrid es segundo en la Liga española, a siete puntos del líder Barcelona, y está clasificado para los octavos de la Liga de Campeones y la final de la Copa del Rey, en una campaña donde el equipo está rindiendo a un alto nivel.
Antes de la llegada de Mourinho, Marcelo, que llegó en 2006 al Real Madrid procedente del Fluminense, tuvo años desiguales en el club, disponiendo de menos minutos con los entrenadores Bernd Schuster y Juande Ramos.
Con el chileno Manuel Pellegrini, técnico del equipo en la 2009-2010, pasó a jugar con más frecuencia y marcó incluso cuatro tantos en Liga, gracias a su paso a una posición más adelantada, como extremo, pero es con Mourinho con el que se ha consolidado como un jugador de referencia.
En la selección brasileña, el gran año en el Real Madrid podría permitirle disputar la Copa América y el amistoso ante Francia podría ser la primera ocasión para reivindicarse, después de no haber jugado en los anteriores partidos de la ‘era Menezes’, en los amistosos ganados a Estados Unidos (2-0), Irán (3-0) y Ucrania (2-0), y el perdido con Argentina (1-0).
