Un total de 55 niños quedaron huérfanos a causa de un accidente ocurrido la semana pasada cuando dos vehículos fueron arrastrados por una riada en una remota localidad de sureste de Bolivia dejando una treintena de muertos, informó este sábado una fuente local.

“Son 55 los huérfanos que quedaron sin padre ni madre”, declaró Wilfredo Ipiña, alcalde de Tarvita, en la comuna rural de Pampa Huasi, en el departamento de Chuquisaca.

Los niños serán trasladados a un internado de Pampa Huasi donde “les proporcionarán alimentación y educación”, dijo Ipiña al diario Página Siete.

Las cifras de víctimas fatales de ese accidente ocurrido a fines de enero oscila entre 30 y 34, algunos de ellos mutilados, razón por la que varios cuerpos fueron sepultados en fosas comunes, según fuentes policiales.

Entre los fallecidos no se cuenta un número no precisado de niños que viajaban en el bus con sus padres, pero que no fueron registrados en las planillas de control.

Los dos vehículos -un ómnibus de pasajeros y un camión de carga- fueron arrastrados la noche del 30 de enero por una intempestiva crecida de las aguas del río Mollepunku, en la localidad de Pampa Huasi, 700 Km al sureste de La Paz.

El comandante regional de la Policía de Chuquisaca, coronel Iver Márquez, dijo previamente a la católica radio Aclo, de Sucre, que efectivos de bomberos fueron al lugar para labores de auxilio.

Sólo seis de las 39 personas que viajaban en el bus lograron salvar la vida, mientras se ignora si el camión llevaba pasajeros, además del chofer y un ayudante.