El vicepresidente egipcio Omar Suleimán negó el jueves que seguidores del oficialismo hayan matado a manifestantes que piden la caída del régimen de Hosni Mubarak, durante refriegas en El Cairo, en declaraciones al canal ABC.

Los oficialistas “actuaron muy bien”, dijo Suleimán al canal ABC.

Al menos ocho personas han muerto y más de 800 resultaron heridas el miércoles y jueves por la mañana en la violencia desatada por ambos campos, y más de 300 personas murieron en la primera semana de protesta, de acuerdo con un balance no confirmado de la ONU.