El presidente de Yemen, Alí Abdalá Saleh anunció el miércoles que no se presentará a la reelección y que aplazará las elecciones legislativas previstas para el 27 de abril, muy cuestionadas por la oposición.

“No habrá gobierno hereditario ni presidencia vitalicia”, dijo Saleh durante una reunión extraordinaria del Parlamento y del consejo consultivo, en momentos en que la oposición prepara manifestaciones para un nuevo “día de la ira” este jueves.

Miles de yemeníes inspirados por las protestas populares en Túnez y Egipto habían salido a la calle el pasado jueves 27 de enero para pedir la renuncia de Saleh, en el poder desde hace 32 años.