La ciudad de Túnez y sus suburbios amanecieron en calma este domingo, tras una noche marcada por denuncias de disparos contra casas desde coches que circulaban a toda velocidad por la calles, las cuales llevaron al ejército a sobrevolar la capital en helicópteros.
webislam.com
Las principales avenidas se encontraban casi desiertas y el ejército patrullaba en lugares estratégicos de la ciudad, constataron periodistas de la AFP, un día y medio después de la fuga del ex mandatario Zine El Abidine Ben Alí a Arabia Saudita.
Por la noche, un ciudadano asustado llamó por teléfono a la AFP, afirmando que la gente “vio a una ambulancia en La Marsa y otra en Megrine (norte y sur de la capital respectivamente). Disparan contra las casas”, agregó, aclarando que los pasajeros de esos vehículos estaban encapuchados.
En Túnez y sus suburbios, donde algunos barrios habían sido sometidos el viernes a la ley y la violencia de los saqueadores, identificados a veces por testigos como partidarios, en especial policías, del régimen de Ben Alí, los habitantes empezaron el sábado a organizarse en comités de defensa.
El influyente sindicato del país, la Unión General de Trabajadores Tunecinos (UGTT) apoyó la formación de comités de vigilantes “para que la gente pueda defenderse” en caso de ataques.
“La seguridad presidencial, que dirigía el general Alí Seriati, integrada por miles de incondicionales de Ben Alí, aún puede seguir causando perjuicios”, indicó una fuente que conoce bien a los allegados al ex presidente, la cual requirió permanecer en el anonimato.
Por otra parte, un sobrino político del ex mandatario, Imed Trabelsi, fue apuñalado y falleció el viernes en el hospital militar de Túnez, indicó el sábado a la AFP una integrante del personal del centro.
Trabelsi era alcalde de La Goulette, un municipio al norte de la capital. En mayo de 2007, la justicia francesa había dictado orden de detención contra él pero la justicia tunecina se había negado a extraditarlo.
El presidente del parlamento tunecino, Fued Mebazaa, fue proclamado el sábado jefe de Estado interino por el Consejo Constitucional, excluyendo definitivamente un regreso del mandatario Zine El Abidine Ben Alí, tras su huida a Arabia Saudita.
