Tras el desprendimiento de una cornisa en un antiguo inmueble de Valparaíso, nuevamente se abre la polémica por el deficiente estado de los edificios afectados después del terremoto.

Críticos momentos se vivieron en la intersección de calles Uruguay con Pedro Montt cuando, inexplicablemente, cayó una cornisa desde lo alto de un céntrico edificio de la comuna puerto.

Comerciantes ambulantes y transeúntes salieron despavoridos al sentir el fuerte impacto entre el material sólido y una cubierta que se había puesto a modo de puente para, paradojalmente, evitar que se desprendiera parte del antiguo edificio.

Personas del sector acusaron negligencia por parte de los propietarios de la estructura que se encuentra en deplorable estado tras el terremoto.

El teniente de Bomberos de la décima compañía, Luis Alvarado, constató el hecho y el real estado del inmueble.

El alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, nuevamente reiteró el llamado al Estado a otorgar nuevos fondos para paliar la compleja situación que pasan las antiguas construcciones, ya que, indicó, la casa consistorial no tiene los dineros para emplear mayores medidas.

La Municipalidad de Valparaíso prohibió el tránsito de peatones en ese sector a la espera de realizarse los estudios necesarios para comunicar a los propietarios y así, eventualmente, ejecutar labores de mejoramiento del edificio.