Una treintena de ONG que trabajan en Afganistán hicieron un llamamiento el viernes a los países de la OTAN para tomar “medidas urgentes” para proteger mejor a los civiles.

Esta iniciativa tiene lugar el día de la apertura en Lisboa de una cumbre de los países miembros de la OTAN dedicada en gran parte a Afganistán, y en particular al calendario de transferencia de responsabilidades en materia de seguridad a las fuerzas afganas.

En su comunicado, estas 29 organizaciones humanitarias, entre ellas Oxfam, Afghanaid y la Comisión afgana de derechos humanos, “instan a la OTAN a ubicar la protección de los civiles en el centro de su estrategia de transición en Afganistán” y a “comprometerse más en la mejora de la formación y seguimiento de las fuerzas de seguridad afganas durante el periodo de transición”.

Según estas organizaciones, las fuerzas afganas son a menudo acusadas de abusos. Son ellas sin embargo las que se entrenan con las fuerzas de seguridad estadounidenses y de la OTAN con el objetivo de asegurar por ellas mismas la seguridad del país, antes de finales de 2014. Este plazo fue fijado en una conferencia internacional en Kabul el pasado julio.

“Hay un gran riesgo de que las fuerzas afganas cometan abusos a gran escala, desde el robo y la extorsión hasta la tortura y los asesinatos indiscriminados de civiles”, destaca Ashley Jackson, una responsable de Oxfam en Afganistán.

“Los Estados miembros de la OTAN que forman, aconsejan, financian y arman a estas fuerzas afganas tienen colectivamente la responsabilidad de evitar estos abusos”, advierte. “Hasta ahora, hemos visto poca acción en la zona”, agrega.

Cerca de 150.OOO soldados estadounidenses y de la OTAN se encuentran en la actualidad desplegados en Afganistán para apoyar el gobierno frente a los insurgentes talibanes, que han ido ganando terreno en estos últimos años.