El ex presidente estadounidense George W. Bush dijo en su autobiografía publicada este martes que le hubiera gustado atrapar el zapato que le lanzó un airado periodista de la televisión iraquí durante su última visita oficial a Bagdad.

“Ojalá hubiera atrapado la maldita cosa”, dijo Bush en referencia al calzado que le arrojó Muntazer al Zaidi a fines de 2008 durante una rueda de prensa del entonces jefe de la Casa Blanca en Bagdad. “El tipo tenía el brazo entrenado”, bromeó, como si se tratara de un lanzador de béisbol.

“Esa fue una de las experiencias más inusuales” que he vivido, dijo el ex mandatario en su libro titulado “Decision Points” (Puntos de decisión), en el que narra sus memorias en sus 8 años de gobierno.

Guerra en Irak, sospechosos sometidos a torturas en interrogatorios: en las memorias publicadas este martes, George W. Bush dice no lamentar las decisiones más emblemáticas de su presidencia, y afirma que volvería a hacer lo mismo para “defender a los estadounidenses”.

Considerado un héroe por muchos en el mundo árabe, Al Zaidi se hizo célebre lanzando sus zapatos contra Bush el 14 de diciembre de 2008 en Bagdad, durante una rueda de prensa conjunta del exgobernante y el primer ministro iraquí, Nuri al-Maliki. Fue condenado a un año de cárcel, pero liberado por buena conducta al cabo de nueve meses de detención.