La escasez de las precipitaciones en la región de Valparaíso, que ha derivado en un déficit hídrico, mantiene preocupados por estos días a las principales autoridades regionales.

Y es que la situación no es menor, considerando que hasta la fecha existe una baja en las aguas lluvias de un 50%, en comparación a un año normal.

Para Jorge Ebner, gobernador de Quillota, una de las provincias más afectadas por esta sequía, las soluciones deben ir dirigidas a la declaración de “Zonas de Escasez Hídrica”, paso previo a la declaratoria de “Emergencia”, lo que permitirá al Gobierno traspasar algunos recursos para la extracción de aguas de los pozos de propiedad el Estado.

Esta operación de extracción de aguas, de más de 80 pozos, está sujeta a todo un estudio técnico y podría costarle al Gobierno más de 8 millones de dólares (unos 4.000 millones de pesos), según comentó el gobernador de San Antonio en el marco de una reunión de análisis sostenida esta mañana.

En diciembre, la región podría entrar en un periodo crítico y las zonas más afectadas serán Petorca-La Ligua, el Valle de Aconcagua y la provincia de San Antonio, principalmente en los sectores agrícolas.

De continuar esta situación, según informaron los gobernadores, el consumo de agua para las personas, también podría vese afectado a futuro.