El Senador del MAS Alejandro Navarro criticó que “la existencia de dos derechas, una dialogante que es el eje RN-Hinzpeter y la otra represiva e intolerante, que es el eje UDI-Larroulet, es el problema que nos tiene ad portas de la muerte de un comunero mapuche, a los presos acudiendo a la ONU, mientras Monseñor Ezzati sigue atado de manos”.
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Navarro agregó que “no ha habido solución a la huelga de hambre debido a la existencia de dos almas en el gobierno. Hay dos cabezas, dos personalidades en la derecha, que aún no se ponen de acuerdo. Por un lado la UDI, represiva y conservadora, no quiere dar pie atrás ni negociar las reformas a la Ley Antiterrorista ni a las leyes de seguridad, y por otro lado RN, que a pesar de haber presentado un mal proyecto, está dispuesta a dialogar”.
El Senador fue categórico al asegurar que “esta esquizofrenia se puede ver en los ministros Hinzpeter y Larroulet, pues mientras el primero se manifiesta dispuesto y flexible, el segundo le da un portazo a Monseñor Ezzati y su rol facilitador, arrojándolo a las soluciones legales”.
El parlamentario criticó el rol del gobierno catalogándolo como “de garrote y zanahoria, con una cara amable y otra agresiva, las que aún no se ponen de acuerdo. Aquí hay un conflicto en la nueva forma de gobernar que no se puede seguir ocultando. O se ponen de acuerdo, es decir, o la UDI se somete a la autoridad presidencial y acepta dialogar, o lamentablemente tendremos comuneros muertos sí o sí”.
Navarro se refirió además a la carta de Héctor Llaitul al Secretario General de la ONU, expresando que este acto demuestra la ineficacia del gobierno, que se arriesga a que el Presidente y el país pasen un bochorno en el extranjero, y además enfatizó en que la UDI no está protegiendo a Piñera.
Para Navarro, el arzobispo Ezzati pide nuevas medidas más allá de la discusión legislativa, pero la UDI “le da un curioso portazo a la iglesia, la que ahora se encuentra atada de manos. Y en el Congreso, ha sido también la UDI la que ha trabado y puesto palitos en el camino, particularmente en la Cámara de Diputados, votando en contra de cualquier modificación a la Ley Antiterrorista”.
Finalmente el legislador llamó al gobierno a “dejar de dirigir el país como si fuera una hidra de varias cabezas, a tomar rienda firme para una solución integral y eficaz, sin voladeros de luces, sin hacer como que se soluciona, pero en verdad no se avanza nada”.
Agregó que los comuneros ya han señalado que quieren diálogo, que están dispuestos a sentarse a una mesa, pero de verdadero diálogo, que busque soluciones y no sólo ganar tiempo.
