Tras meses de espera, un adulto mayor deberá ser sepultado en una fosa común debido a que nadie reclamó su cuerpo en el servicio médico legal de Osorno.
El sábado 24 de abril de éste año, MARCOS LEÓN BARRÍA MANCILLA de 65 años, fue encontrado sin vida por vecinos al interior de la modesta vivienda que habitaba en el sector del campamento Ferroviario en Ovejería.
Luego de las pericias tanatológicas, se estableció que su deceso fue a causa de un paro cardiorrespiratorio descartándose la intervención de terceras personas, permaneciendo desde entonces su cuerpo en el servicio médico legal.
Con el correr del tiempo y pese a una serie de gestiones, no hubo quien lo reclamara y por orden del ministerio público actualmente se tramita su sepultación en una fosa común en el cementerio municipal de Rahue Alto.
En el servicio médico legal de Osorno, esperan que ésta historia no se repita con el adulto mayor que la semana pasada fue arrollado por un camión en la ruta U 55 a Puerto Octay a 15 kilómetros de Osorno, debido a que aún resulta imposible establecer la identidad de la victima debido a que ningún familiar se ha acercado a la institución.
