El propietario que se negó a la reparación del Edificio Castellón, y demandó en tribunales consiguiendo la paralización de obras, asegura que el proceso convenido entre la administración de copropietarios y la inmobiliaria Víctor Lamas está viciado.
Alejandro Flores, propietario de uno de los 228 departamentos del Edificio Castellón, manifestó su malestar por la acusación pública, realizada por la presidenta de los copropietarios Carolina Rudnick, quien reveló que el joven interpuso una demanda ante tribunales y paralizó las faenas de reparación del edificio, afectando al 77% de los residentes que estaba de acuerdo con la reparación y las medidas compensatorias concensuadas con la inmobiliaria.
La construcción consignada en grado 2 después del terremoto, es decir con la posibilidad de ser reparada, empezaba con éstas faenas incluso con los permisos municipales correspondientes, pero fue detenida por la demanda de Flores, quien expresó que es imposible estar de acuerdo con las reparaciones que realizaría la misma constructora Etcheverría Izquierdo que edificó incumpliendo normas, con errores y cálculos deficientes, que incluso mantiene un edificio en calle Carrera con órden de demolición.
Flores, Ingeniero Civil Estructural de 30 años dio a conocer que existe además un 16% de vecinos que se opuso a los acuerdos a los que llegó la administración del edificio, copropietarios y la Inmobiliaria; esto debido a que no hubo presentación de un proyecto acabado de cómo se realizarán las reparaciones.
Al mismo tiempo agregó que él compró un departamento de entre mil 300 UF y 3 mil UF que actualmente no vale ni la mitad y tampoco valdrá lo mismo con reparaciones, por lo que exige su devolución total.