Sorpresa fue la que se llevó el gobernador provincial de Quillota, Jorge Ebner, tras una visita realizada a la escuela calerana El Libertador, tras verificar que el acceso principal a este establecimiento estaba convertido en un verdadero basural.
La inspección se gestó tras la solicitud de la presidenta de la junta de vecinos del sector Libertador Bernardo O’Higgins, Liliana Sandoval, quien pidió a la autoridad visitar el lugar por un problema que sufre el colegio en sus cierres perimetrales, los que fueron dañados por el terremoto y representan actualmente un problema de seguridad para los alumnos.
En el recorrido estuvo presente la directiva de la junta de vecinos, el director de la escuela, representante del municipio y el gobernador, quien quiso conocer de cerca la realidad del establecimiento una vez que encontró este problema de salubridad, informó Foto Quinta.
“Conversé con el director y me dio explicaciones que no se justifican. Enviaremos un oficio al alcalde Martínez respecto de esta situación, contando lo que vimos para que tome cartas en el asunto, porque es muy grave que los niños de un colegio estén expuestos a un basural”, expresó Ebner.
La autoridad agregó que “se debe tener mucho cuidado con este tipo de descuidos, porque las enfermedades derivadas de la basura pueden traer consecuencias, sobre todo para niños que cursan su educación básica”, acotó.
Liliana Sandoval, presidenta de la junta de vecinos, expresó su preocupación por el estado del cierre perimetral y las consecuencias que ha traído a la comunidad educativa. “Necesitamos una mejora en el establecimiento de manera urgente, porque los problemas de seguridad son reiterativos”, dijo.
En la oportunidad se recordó que existe un proyecto presentado y se agregarán nuevos antecedentes para atraer recursos para mejorar estas falencias y realizar un cierre perimetral reforzado estructuralmente para solucionar el problema.