Casi un mes de espera cumplen los niños de un jardín infantil de Negrete, el que fue dañado por el terremoto y no se puede reconstruir por diferencias entre el municipio e Integra.
Los cerca de 70 niños que atiende el establecimiento Caperucita Roja, estarían trabajando a media capacidad luego del sismo, ya que la mitad de ellos está en clases en una sede vecinal y la otra en su casa sin actividades.
Así lo señalaron los apoderados del jardín, quienes están preocupados por el futuro de los pequeños, ya que el municipio debía limpiar el terreno para emplazar la escuela modular en que funcionará el recinto a partir de
octubre.
Según el alcalde de Negrete Edwin Von Jentschyk esto se debe la negativa de los vecinos del edificio de que se realicen los trabajos, por lo que las maquinas estuvieron 4 días en el lugar sin poder trabajar.
Y sostuvo que el municipio no tiene problemas en limpiar el emplazamiento, pero es una cuerdo que debe formalizar Integra con los vecinos del jardín Caperucita Roja, lo que informó a los apoderados del establecimiento luego de una reunión.
Sin embargo, los padres de los niños que asisten al recinto continúan aguardando por una solución, ya que existirían por lo menos una treintena de menores que por falta de espacio, no estarían realizando sus actividades escolares.
