Una solicitud al ministerio de Obras Públicas (MOP), a través de la Coordinación de Concesiones, realizó el consejero regional Manuel Millones para que la empresa concesionaria de la Ruta 68 se haga cargo de la conservación y mantención de la variante Agua Santa y de la intervención del camino Lo Orozco, entre Casablanca y Quilpué.

Según Millones el alto flujo vehicular que se produce en estas rutas por ser alimentadoras de la carretera Valparaíso-Santiago, las han deteriorado notablemente, por lo que debe ser la concesionaria la encargada de mantener su estándar de calidad.

En el caso de Lo Orozco, aunque esté bien conservada, el consejero dijo que es altamente riesgosa por su conformación de curvas peligrosas y pendientes. Por tanto, se requiere hacer una cirugía mayor y ampliarla a 3 pistas, entre otras obras. Inversión que podría ser parte de los trabajos a ejecutar por la empresa concesionaria de la Ruta 68.

Ante la solicitud, la coordinación de Concesiones, respondió que es factible considerar estas demandas cuando se vuelva a licitar la ruta 68.