Candidatos a la presidencia del Partido Socialista, difieren sobre la solicitud del presidente de la colectividad, Fulvio Rossi, para que se permita votar en las elecciones del 4 de julio a militantes que inhabilitados por el Tribunal Supremo.

Son cerca de mil 800 personas, no 3 mil 300 como se dijo en un principio, a quienes la instancia disciplinaria inhabilitó porque sus afilaciones se legalizaron en febrero de este año, es decir, no cumplen el requisito mínimo de 6 meses de militancia para sufragar.

Sin embargo, la gran mayoría de ellos firmó la ficha el año pasado, lo que llevó a Rossi a pedir al Tribunal Supremo considerar ese documento como el válido para participar.

La postura del presidente del PS fue respaldada por Álvaro Elizalde, candidato a presidente por el Tercerismo.

En cambio, el diputado Marcelo Díaz, abanderado del grupo Nuestra Revolución, exigió que se respete la decisión del Tribunal Supremo que inhabilita para votar al grupo de militates en cuestión.

La posición de Díaz es compartida por la lista Frente Allendista, que encabeza el dirigente Héctor López, quien se opuso a un acuerdo político y pidió que se respete el pronunciamiento del Tribunal Supremo.

López agregó que hay otras situaciones sospechosas, como por ejemplo que aparecen 170 nuevos militantes en Chimbarongo; 400 en San Ramón y 709 en Calle Larga; cifras que no guardan proporción con el número de habitantes en esas comunas.

De paso, desmintió que el Frente Allendista vaya a pedir la suspensión de las elecciones para que intervenga el comité central.