Varias deficiencias deberán subsanar las tiendas y supermercados, que debido al terremoto comercializan sus productos en carpas, si quieren seguir funcionando. Las principales fallas apuntan a la instalación de servicios sanitarios y mejoras en las vías de escape en caso de producirse algún tipo de emergencia.

Son varias las empresas que decidieron instalarse bajo gigantescas carpas tipo circenses para evitar sufrir mayores pérdidas, luego de las condiciones en las que quedaron los inmuebles donde funcionaban, ya fuera producto del movimiento telúrico en sí o por los posteriores saqueos.

Es el caso del supermercado Santa Isabel, la tienda Easy y Ripley, cuyas tiendas de “campaña”, se levantan en Concepción, Talcahuano y también en la comuna de Hualpén, empresas en las que sus propios clientes enumeran las deficiencias vistas.

Alex Muñoz, encargado del control sanitario de la Seremi de salud en Talcahuano indicó que además de los servicios higiénicos, son varios los problemas que han comunicado a las empresas y que éstas deben solucionar a la brevedad.

En la Municipalidad de Concepción en tanto, el Jefe Subrrogante del Departamento de Patentes, Elias León, indicó que actualmente la tiendas poseen permisos provisorios, los que deberán ser renovados por un año previa mejora de las observaciones notificadas tras las fiscalizaciones.

El experto en prevención de riesgos de la Asociación Chilena de Seguridad, Felipe Meneses, dijo que al operar bajo este tipo de condiciones es más necesaria la implementación de un plan de emergencia, puntualizando uno de los temas que mayores problemas puede acarrear con las lluvias venideras, como lo es lo relativo a las instalaciones eléctricas.

Actualmente las tiendas funcionan por decretos edilicios, pero si no se mejoran los temas relativos a la higiene y seguridad, los permisos para que sigan funcionando van a ser caducados.