Grecia estaba de nuevo paralizada este jueves por una huelga general, la segunda en quince días, organizada por las grandes centrales sindicales contra las medidas de austeridad decididas por el gobierno para sacar al país de una crisis financiera sin precedentes.

Desde medianoche, tanto los transportes aéreos como marítimos estaban paralizados y los servicios ferroviarios interrumpidos.

Sólo una línea del metro funcionaba en Atenas, para permitir a los huelguistas dirigirse a las manifestaciones organizadas por los sindicatos en el centro de la capital a mediodía.

Los otros transportes urbanos, autobuses, trolebuses y tranvías, estaban paralizados.

Otras manifestaciones debían llevarse a cabo en las grandes ciudades griegas, en particular en Salónica (norte), la segunda ciudad del país.

El frente sindical del partido comunista ultraortodoxo, el PAME, llamó a manifestaciones aparte.

La huelga debía provocar el cierre de las escuelas y de la administración pública, mientras que los bancos y las grandes empresas del sector público funcionaban a ritmo mínimo.

Los hospitales públicos funcionaban sólo con personal de emergencia.

El país también está privado de toda información de radio y televisión debido a la participación en el movimiento del sindicato de periodistas (POESY).

La agencia de prensa nacional ANNA suspendió sus informaciones durante 24 horas desde las 06H00 locales (04H00 GMT). Los diarios no aparecerán el viernes.

El movimiento fue decidido por la poderosa Confederación General de los Trabajadores Griegos (GSEE, 1 millón de adherentes) y la Federación de los Funcionarios ADEDY, que cuenta 375.000 miembros.

La huelga fue convocada el viernes pasado, en el mismo momento en que la mayoría socialista votaba en el Parlamento el nuevo paquete de medidas que incluye recortes salariales en la función pública, el congelamiento de las jubilaciones y un alza de dos puntos, a 21%, del IVA (Impuesto al Valor Agregado).

Más de ocho de cada diez griegos estiman que las medidas adoptadas provocarán un alza del índice de pobreza en el país, según una encuesta publicada el domingo en un periódico.