Las sospechas de que hubo fraude en la elección presidencial afgana ganaron fuerza hoy, después de que miles de votos fueran anulados, y mientras crece la preocupación de Occidente en torno al futuro del país.

Según avanza el conteo de la elección celebrada el 20 de agosto, el presidente saliente Hamid Karzai se acerca al 50% necesario para evitar una segunda vuelta contra el ex canciller Abdulá Abdulá.

Alrededor de 200.000 votos fueron anulados por fraude, dijo un responsable de la comisión electoral que indicó que muchas papeletas habían sido “marcadas con un mismo lápiz en favor del mismo candidato”.

Según el diario New York Times, partidarios de Karzai instalaron centenares de colegios electorales ficticios, en los que nadie votó pero en los que sin embargo fueron registradas miles de papeletas en favor del presidente saliente.