El presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, descartó toda conversación sobre su “innegable” derecho nuclear, e insistió en que cualquier diálogo sobre el este asunto se centraría en la “cooperación sobre un uso pacífico de la energía atómica” y la “no proliferación”.

El presidente iraní también señaló que la República Islámica está dispuesta a entablar un “diálogo en un marco lógico y justo” con las grandes potencias, y que él mismo está listo para conversar públicamente con el presidente estadounidense, Barack Obama.

En tanto, el jefe de la Agencia, Mohamed ElBaradei, rechazó acusaciones de que escondería pruebas sobre el programa nuclear de Irán, acusaciones que calificó de “infundadas y políticamente motivadas”.