1914-1918
Familia Yarur
Eran inicios del siglo XX, específicamente en 1914, cuando el destino de los Yarur cambiaría para siempre. En ese entonces, Juan Yarur Lolas vivía en Belén, Palestina, junto a su esposa Olombi Banna y su primogénito, Carlos. Él se hacía cargo del negocio de artesanía en nácar.
Ante los conflictos sociales y económicos, Juan decidió partir a Chile a sus 18 años, junto a su hermano menor Nicolás, dejando atrás (temporalmente) a su esposa y su hijo Carlos.
Como la situación en Chile tampoco era la más auspiciante, decidió radicarse en Bolivia, donde vivían sus tíos por parte materna, los Lolas.
Mundo
La situación en Palestina no era la mejor para las minorías cristianas, las que eran marginadas dentro de la región, que en ese entonces era parte del Imperio Turco Otomano. La perspectiva de tener que unirse al ejército de esa superpotencia tampoco entusiasmaba a muchos.
Estas y otras condiciones provocaron una migración masiva de familias palestinas cristianas a América.
1918
Familia Yarur
Al poco tiempo de vivir en Bolivia, llegó al país su esposa Olombi y se mudaron a Perú. En la ciudad peruana de Arequipa es donde nació, el 24 de diciembre de 1918, Jorge Yarur Banna, su segundo hijo, seguido poco después por el tercero, Amador.
En 1920, la familia finalmente se reúne cuando su hijo Carlos llegó a Perú desde Belén, mientras que el hermano de Juan, Nicolás, regresó a Palestina (más tarde volvería a Chile).
Grupo Yarur
Mientras estaban en Arequipa, Juan Yarur comenzó su vínculo con la industria textil, de la mano de los Said, otra familia palestina que vivía en Perú y que también tenía intereses en el área.
Mundo
En 1932, comienza la Guerra del Chaco, entre Bolivia y Paraguay. Este conflicto bélico ayudó a los Yarur a consolidar su nombre en la industria textil, gracias a que proveían de uniformes y frazadas al ejército boliviano.
1933-1937
Familia Yarur
Juan Yarur logró tanto éxito en la industria textil que, en 1933, el Gobierno de Chile lo invitó a crear una fábrica en Chile.
La idea prosperó, por lo que toda su familia, incluyendo su hijo Jorge, entonces un adolescente, se trasladaron a Santiago, desde donde ya no volverían a irse.
Grupo Yarur
Gracias a un crédito millonario del Banco de Chile y otros préstamos estadounidenses, se construyó la inmensa Fábrica Yarur Manufacturas Chilenas de Algodón, una industria de textiles que se convertiría muy pronto en la más importante del país.
Inaugurada en 1937, tenía 25 mil metros cuadrados construidos y contaba con 1.000 trabajadores, siendo la más moderna en su tipo en toda Sudamérica. En total tuvo un costo aproximado de $10.000.000 de la época.
Ese mismo año, Juan Yarur también lideró la compra -junto a otros empresarios- de un banco menor que convirtió en el Banco de Crédito e Inversiones, actual Bci.
Mundo
Los logros de los Yarur alcanzan especial importancia si consideramos que, en esa época, recién había pasado la Gran Depresión.
La crisis del 29 es una de las catástrofes económicas más relevantes que ha sufrido el mundo y se prolongó hasta alrededor de 1933.
1946
Familia Yarur
Tras radicarse en Santiago, Jorge Yarur Banna ingresó a estudiar Derecho a la Universidad de Chile, carrera de la que se tituló en 1946. Después de ejercer un tiempo como abogado, comenzó a asumir responsabilidades en el manejo de la Fábrica Yarur.
Por otra parte, la familia Yarur ya estaba convertida en una de las más ricas y respetadas de Chile.
Grupo Yarur
La familia Yarur, y especialmente el patriarca Juan Yarur Lolas, eran muy queridos por los trabajadores de la fábrica, gracias a que otorgaban beneficios sociales que casi ninguna empresa daba en ese momento.
Entre ellos se encontraban: una clínica, servicios higiénicos con agua caliente, sala cuna, un amplio casino con alimentos gratuitos, un banco, un estadio e incluso un teatro. Años más tarde se sumaría una población con viviendas para los obreros: el Barrio Yarur.
Mundo
El período de la Segunda Guerra Mundial fue vital para consolidar la industria nacional, a pesar de la escasez de materias primas, porque había un mercado sin competencias externas.
Por otra parte, al terminar el conflicto bélico, el mundo comenzó un arduo período de reconstrucción, en que literalmente había que levantar países completos que fueron destruidos durante el conflicto.
A partir de allí, en el mundo comenzaría una fase en que se querían dejar atrás los horrores y construir un futuro próspero para todos.
1954
Familia Yarur
En 1954, una tragedia azota a la familia cuando Juan Yarur Lolas muere de un infarto mientras iba conduciendo su automóvil (era un hombre sencillo y no dado a los lujos, por lo que no tenía chofer).
Para honrar al querido patriarca, los trabajadores hicieron una gran estatua de don Juan, con el apoyo
de la familia, la cual levantaron en el ingreso a la fábrica. Actualmente, esa obra se encuentra en la entrada del Museo de la Moda de Santiago, que fundó Jorge Yarur Bascuñán (único hijo de Jorge Yarur Banna) en la que era su casa familiar.
Grupo Yarur
Tras la muerte de su padre Juan Yarur Lolas, su hijo Jorge Yarur Banna asume el liderazgo de la Fábrica Yarur y del Banco de Crédito e Inversiones.
En la Fábrica, Jorge impulsa un proceso de modernización, guiándose por modelos norteamericanos, que lograron aumentar su producción.
En paralelo, Jorge Yarur Banna asume la presidencia y el liderazgo del Banco de Crédito de Inversiones Bci, el que desarrolla y hace crecer para apoyar a las personas y las pymes
En este entonces, Jorge Yarur ya se destacaba como un empresario moderno y con gran visión de futuro. También era muy trabajólico y enteramente dedicado a sus empresas, algo que sería vital para que el banco sobreviviera hasta nuestros días.
Mundo
La década de 1950 fue la que vivió en su máxima expresión el “sueño americano”, especialmente en Estados Unidos y Europa, que es ese ideal de terminar con las penurias que dejó la Segunda Guerra y comenzar una nueva vida perfecta.
Parte de esta idealización son el ‘sueño de la casa propia’, el tener un automóvil último modelo, tener más tiempo de esparcimiento y poder llevar, en general, una vida tranquila y sin mayores preocupaciones en el ámbito económico.
En tanto, hacia 1955 América Latina completa y Chile en particular estaban viviendo una fuerte crisis económica. El problema de estagnación productiva con inflación es dramático y da cuenta de la crisis del modelo ISI (industrialización sustitutiva de las importaciones).
1958
Familia Yarur
Jorge Yarur Banna contrajo matrimonio con Raquel Bascuñán Cugnoni. Para celebrar su unión, la pareja se fue en un viaje por Europa que duró 8 meses.
Durante esa travesía, la pareja también ideó el primer boceto de la que posteriormente sería su casa familiar, actual Museo de la Moda, una de las mansiones más icónicas de Santiago.
Grupo Yarur
Durante los 50 y 60, la fábrica Yarur alcanzó su máximo esplendor, llegando a ser un pilar fundamental de la economía nacional en un mercado interno sin competencias.
Así lo reflejaban las cifras: la empresa familiar elaboraba el 70% de la producción textil de todo el país, lo que -a su vez- representaba el 11% del total de la producción industrial chilena.
Esto significaba que, además, generaba mucho empleo: sólo la fábrica central daba trabajo a más de 5 mil personas.
Mundo
Estando el mundo sumido en la Guerra Fría, comienza a desarrollarse la carrera espacial, que marcaría un hito para la humanidad en los próximos años, con la llegada del hombre a la Luna en 1969.
La competencia por llegar al espacio se inició con el proyecto Sputnik, con que Rusia logró poner en órbita el primer satélite artificial a fines de 1957.
Esto hizo que muchos estadounidenses se sintieran amenazados, pues hasta ese momento creían que su país era el más avanzado tecnológicamente, una ventaja que ahora podían perder frente a los rusos.
Por otra parte, en Latinoamérica destacó la revolución cubana, que tomó el poder en su país en 1959 y donde Fidel Castro se mantuvo como dictador por 50 años, hasta su muerte en 2016.
1961-1962
Familia Yarur
El 16 de mayo de 1961, el matrimonio Yarur Bascuñán recibió a su primer y único hijo, Jorge.
Al año siguiente, la familia se mudó a la que sería su residencia por muchas décadas: su casa en Vitacura, una vivienda de gigantescas proporciones que se ha destacado por ser un diseño muy único y diferente respecto a lo que se acostumbraba en ese entonces. Esta obra daba cuenta de la mentalidad progresista de sus dueños, quienes se involucraron directamente en su creación.
La vivienda tiene cuatro grandes corredores que se unen al centro, formando una suerte de X y dividiendo el espacio entre dormitorios y múltiples salas de descanso y esparcimiento, donde a Jorge Yarur y Raquel Bascuñán les gustaba reunirse con sus amigos al menos una vez por semana.
El historiador Alfredo Jocelyn-Holt Letelier en su libro La Casa del Museo (Editorial Taurus) profundiza sobre la historia de la casa de la familia Yarur Bascuñán.
Otro aspecto de la edificación que llamaba fuertemente la atención era que sus paredes exteriores eran en su mayoría de vidrio, permitiendo que se viera hacia el interior. Dicho diseño era inédito e impensado en Chile, donde la clase alta era conocida por preferir una máxima privacidad en sus viviendas, con muros altos y cerrados.
Esta particular construcción, que se asemejaba más a estilos innovadores de Estados Unidos y Europa, aún es conservada en muy buen estado, pues es la actual sede del ya mencionado Museo de la Moda, inaugurado por Jorge Yarur Bascuñán en 2007.
Grupo Yarur
A inicios de la década del 60, la industria chilena aún gozaba de buena salud, pero a medida que avanzaron los años comenzó a desacelerarse, en concordancia con lo que ocurría en la economía mundial de postguerra.
Jorge Yarur Banna seguía al mando del Banco de Crédito e Inversiones y, más alejado de la dirección de la Fábrica Yarur -ahora a cargo de su hermano Amador- también se concentraba en otros de los múltiples negocios de la familia, como Tejidos Caupolicán (en Chiguayante y Renca), donde se producían telas sintéticas, una gran innovación para la época impulsada por el propio Jorge Yarur.
Mundo
Desde la década de los 50 que el mundo comenzó a sufrir otro cambio drástico debido a la llegada de una nueva generación, jóvenes que no vivieron las grandes guerras y que, por lo tanto, crecieron en una época de prosperidad y de “sueño americano”.
Una parte considerable de la sociedad se movió hacia la extrema izquierda, y las problemáticas sociales y luchas por los derechos civiles se tomaron las calles.
Asimismo, se presenciaron asesinatos de alto impacto de personajes de gran influencia política y social, como el presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy (1963) y, unos años más tarde, el de Marthin Luther King (1968).
1968
Familia Yarur
Acercándose a los años 70, empezaban a sentirse los signos de intolerancia y violencia que se instalarían muy poco después, durante el gobierno de la Unidad Popular.
En una sociedad que cada vez rechazaba con más fuerza el estilo de vida que representaban los Yarur y otras familias empresariales chilenas, Jorge Yarur Banna tuvo que enfrentar momentos difíciles.
La situación llegó al punto en que Yarur Banna y su familia fueron víctimas de extorsión, siendo amenazados de muerte si no pagaban un millón de escudos. El entonces niño Jorge Yarur Bascuñán tenía que ir al colegio protegido por guardaespaldas.
Mundo
Lo que hace unos años eran movimientos reducidos de ideas extremistas, a esta altura ya habían ganado mucha fuerza, con amplias protestas lideradas por jóvenes, en su mayoría estudiantes, que exigían cambios políticos y sociales.
En oposición, parte importante de la sociedad más adulta en Estados Unidos y Europa se movía hacia la derecha.
1970-1973
Familia Yarur
El Gobierno de Allende fue fatal para los negocios de la familia Yarur. El Estado les expropió la Fábrica Yarur, que amaneció el 26 de abril de 1971 tomada por los trabajadores y con un gran lienzo en el frontis que decía ‘Yarur, territorio libre de explotación’.
Además de eso, el Gobierno de Allende intervino el Banco de Crédito e Inversiones y una potencial reforma urbana también amenazaba con quitarles su vivienda particular a los Yarur Bascuñán.
Ante esta abierta hostilidad en su contra, Jorge Yarur Banna y su familia se fueron a vivir a Buenos Aires, Argentina, pero a los seis meses regresaron, pues el abogado y líder empresarial decidió resistir con más energía las embestidas del Gobierno en contra de su patrimonio y el legado de su padre, Juan Yarur Lolas.
Mundo
En el ámbito mundial, en esta época ocurrieron escándalos en Estados Unidos que cambiarían la percepción del mundo sobre la política para siempre, provocando que parte considerable de la ciudadanía perdiera confianza en las autoridades.
Estamos hablando de los Papeles del Pentágono y del escándalo Watergate.
La primera polémica reveló a la luz pública la intervención de Estados Unidos en Vietnam y dio a conocer que las autoridades norteamericanas continuaron con la guerra en la nación asiática por años, pese a que sabían que no podían ganarla.
La segunda provocó la caída final del presidente de EEUU, el republicano Richard Nixon, al desvelar que estaba espiando y acosando ilegalmente a políticos opositores.
1973-1990
Familia Yarur
Si bien el Gobierno de la Unidad Popular fue difícil para la familia Yarur, los años que siguieron tampoco fueron fáciles para sus negocios.
Después del golpe de 1973, Jorge Yarur Banna recuperó el control del Banco de Crédito e Inversiones y Amador volvió a dirigir la Fábrica Yarur. No obstante, las reformas económicas que comenzó a impulsar la dictadura del general Augusto Pinochet, dirigidas por un grupo de economistas conocidos como los Chicago Boy, afectaron gravemente la industria nacional y llevaron a una crisis durante los 80.
La fábrica de los Yarur liderada por Amador Yarur no fue ajena a la crisis y quebró en 1982, cerrando sus puertas tras casi cinco décadas de liderar el área industrial chilena. Entre las razones está que fue incapaz de competir con las telas importadas, algo que también ocurrió a empresas de otros rubros.
En tanto, Jorge Yarur Banna dio una dura pelea para hacer sobrevivir al Bci, del que era presidente y accionista controlador.
Al igual que otras entidades bancarias de la época, el Banco de Crédito e Inversiones, ya conocido como BCI en esta década, tuvo que adquirir una gran deuda con el Banco Central en 1982 para poder sobrevivir a la crisis.
Mundo
El mundo vivía una situación similar a la de Chile, con la Guerra Fría aún en su máximo apogeo y la sociedad totalmente polarizada.
Chile y otros países de América Latina pasaron por una crisis, lo que provocó que muchos acumularan una deuda externa muy elevada, sin contar con los medios para pagarla.
Mientras que en Chile se vivió la transición hacia la democracia entre 1988 y 1990, algo similar ocurría en el resto del mundo, donde la Unión Soviética comenzó a disolverse tras la Perestroika (reforma económica implementada por Mijaíl Gorbachov) y también disminuyó considerablemente su influencia.
Hechos históricos icónicos sucedieron ese período, como el accidente nuclear de Chernóbil en 1986 y la caída del Muro de Berlín en 1989, que implicó la reunificación de Alemania.
1991
Familia Yarur
El 17 de octubre de 1991, Jorge Yarur Banna celebró públicamente la recompra de la deuda del Banco de Crédito e Inversiones (BCI) al Banco Central por la crisis del ´82, siendo el primer banco privado en lograrlo. Horas más tarde, fue llevado a un recinto de salud. Ya era tarde.
Como fundador, presidente y accionista controlador del BCI, Jorge Yarur fue un hombre leal y generoso, que se adelantó a su época logrando un desarrollo compartido con sus trabajadores y con el país.
Tras su muerte hace justo 30 años, el control accionario del BCI fue heredado por su mujer Raquel Bascuñán Cugnoni y su único hijo Jorge Yarur Bascuñán, a quienes se les arrebató el control del banco: ”A la postre, sin embargo, se vería que quedaron a merced de apoderados que no tuvieron a buen resguardo los cuantiosos intereses envueltos". Se efectuaron traspasos de acciones del Banco de Crédito e Inversiones para dejar fuera a Raquel Bascuñán y su hijo Jorge Yarur del control del banco, el que quedó en manos (hasta hoy) de uno de sus primos hermanos, Luis Enrique Yarur, a quien Jorge Yarur Banna "formó para hacerse cargo de la gerencia del banco, pero no de su propiedad” (La Casa del Museo, Alfredo Jocelyn-Holt).
En 1996 falleció Raquel Bascuñán.
El actual Museo de la Moda fue una idea que nació de su hijo, Jorge Yarur Bascuñán, luego de que su madre le manifestara que con su padre habían pensado en convertir la vivienda en un sitio dedicado al arte y la cultura (Raquel pintaba oleos y era amante de la moda y del arte en general).
En la actualidad, el Museo de la Moda no sólo es una forma especial de homenajear el legado de los Yarur Bascuñán, sino que también se ha convertido en un referente del área a nivel internacional, contando con colecciones icónicas a nivel mundial, con estándares de conservación de textiles de los mejores del mundo y con un equipo de restauración del más alto nivel.