Con arresto domiciliario total y arraigo nacional quedó Edison Aedo Recabal, conductor del bus de la empresa Línea Azul que la madrugada del lunes volcó en San Francisco de Mostazal, provocando la muerte de seis pasajeros.
La Fiscalía lo formalizó por cuasidelito de homicidio y ratificó los antecedentes que adelantó Radio Bío Bío, relacionados con una placa patente adulterada: el bus tenía el documento de una máquina que cuenta con prohibición de circular desde 2016 y que estaba de baja en Chillán.
El vehículo accidentado no debía estar operando, afirmó el fiscal regional subrogante, Javier Von Bishoffshaussen, quien adelantó que por este antecedente podría formalizarse a otras personas, entre ellos representantes de Línea Azul.
“Seguimos haciendo diligencias en Chillán y Santiago para abordar si es que hay otras personas que puedan tener algún tipo de responsabilidad en estos hechos”, subrayó.
De acuerdo a lo señalado por la Fiscalía, el conductor circulaba a exceso de velocidad y con los sensores desconectados. Además, el bus habría presentado fallas mecánicas en la barra de dirección, lo que sería la principal causa del accidente.
Por su parte, el conductor negó haber manejado sobre los límites de velocidad permitidos, narró parte del accidente y ofreció disculpas a las familias de las víctimas.
“De repente partió sola para un lado. Fue todo tan rápido todo. A los familiares, mil disculpas, Dios sabe que yo hice todo lo posible para que no le pasara nada a nadie”, aseguró.
En tanto, la ministra de Transportes, Gloria Hutt, negó responsabilidad por posibles errores en las fiscalizaciones, ya que “las hacemos a partir de la buena fe y de evidencia concreta de que existen los documentos, que los buses están circulando con todo lo que tiene que circular. Cuando hay delitos, esos delitos no son fácilmente identificables y esos delitos han surgido a partir de esta investigación. No tenemos forma de detectarlo de manera instantánea”, admitió.
Toda la flota sin permiso
Considerando lo anterior, durante la mañana del miércoles, Hutt había asegurado que cuando la Fiscalía envíe los antecedentes relacionados a la falsificación de los documentos, iniciarán un proceso sancionatorio contra Línea Azul.
Y así fue. Al cierre de la jornada se supo que el Ministerio de Transportes (MTT) resolvió iniciar el proceso para cancelar los permisos de operatividad de todos los buses de la empresa Línea Azul, tras constatar graves irregularidades.
De este modo, según confirmó en Chillán la seremi de Transportes de Ñuble, Bárbara Kopplin, se inició un proceso administrativo que será notificado próximamente a la empresa.
En concreto, la compañía quedó sin permiso para transportar pasajeros en los cerca de 30 buses registrados por la cuestionada empresa. Kopplin especificó que el proceso debe iniciarse especialmente en la región del Maule, donde están inscritos la mayoría de las unidades.
“(…) aquí se está haciendo una investigación por parte de Fiscalía… es un proceso largo, no es de la noche a la mañana”, aclaró la autoridad regional de Transportes, añadiendo que el proceso “puede durar 6 meses, no es una cuestión que se cancele de la noche a la mañana”.
En esa línea, enfatizó en que hasta el momento “no se ha cancelado ningún servicio (…) nosotros como Transportes estamos entregando todos los antecedentes necesarios que se nos exijan”.
Durante las últimas horas hubo allanamientos a los talleres en Santiago, Rancagua y Chillán, donde se constataron irregularidades por las cuales el MTT resolvió iniciar el proceso sancionatorio.
A contramano, a empresa tendrá entonces 5 días tras concretarse la notificación para presentar sus descargos. Por el momento, los servicios de Linea Azul entre Concepción y Chillán están operando con normalidad, mientras que los buses entre Santiago y Chillán retomarían su recorrido este fin de semana.
Con todo, el Juzgado de Garantía de Graneros determinó 200 días para la indagatoria respecto al accidente, plazo en el que la Fiscalía insistirá con sus diligencias, no solo en las sucursales de la empresa en Santiago, sino también en Chillán, donde está la oficina central.
