A una semana de que miles de egresados de la enseñanza media comiencen a rendir la Prueba de Selección Universitaria (PSU) los nervios y la ansiedad aumentan, por lo que ¿cuáles son las recomendaciones para enfrentar estos últimos siete días?.
En este contexto la académica de aprendizaje y desarrollo de la facultad de educación de la Universidad Católica, Verónica Lillo, comentó en el Podría Ser Peor, que lo más importante, por difícil que sea, es tratar de relajarse en este periodo.
“Intentar relajarse en una situación de estrés tan alto como es la PSU, es difícil, sin embargo es bien posible, sí se puede“, aseveró.
Entre las recomendaciones, la académica indicó que es necesario comenzar a dormir a lo menos siete horas cada noche y tener una alimentación lo más sana posible.
“Los jóvenes ya saben lo que les hace mal, saben que las trasnochadas no son recomendables en este periodo y la ingesta de cualquier bebida o algún medicamento que ellos tomen que a veces se los recomienda alguien para poder estar más atentos, más alerta y durar más tiempo en la noche para seguir estudiando, eso, ya hay que eliminarlo completamente”, explicó.
Una de las cosas que sí pueden ayudar y ser un aporte para esta última semana, es realizar ensayos tipo formato PSU, dice la experta, porque esto les permitirá “comenzar a sentirse más cómodos con el formato de la prueba, el tipo de pregunta, hacer estos ensayos con un cronómetro para ver cuánto tiempo demoran y cuánto tiempo deberían demorar por cada pregunta, de acuerdo a la duración de la prueba, este es el minuto de tratar de ser lo más eficientes posible”, dijo.
La noche antes de la prueba, puede ser una de las más angustiantes para aquellos que vayan a dar el examen, por lo que Lillo recomienda realizar ejercicios de relajación y compartir con amigos y/o la familia, además de ir probando rutinas de sueño, por medio de actos cotidianos como por ejemplo “escuchar música antes de dormir, o no ver televisión o a lo mejor ver una película que los distraiga, no existen recetas que sirvan para todo, sino principios generales, que tienen que ser lo más naturales posible”.
A estas alturas, algunos alumnos quieren seguir adquiriendo nuevos conocimientos, pero para la académica esto no es muy recomendable, lo que sí fomenta es el repaso de resúmenes como “esquemas, mapas conceptuales, y si a ellos les entrega buenos resultados, por supuesto es bueno que los usen“, afirma.
En cuanto a la alimentación, recomienda que esta semana prueben diferentes tipos de desayunos, para que el día de la prueba coman lo que los haga sentir mejor “porque tener el estómago muy pesado tampoco va a facilitar el buen rendimiento, lo mismo si a ellos les da ganas de ir al baño, entonces no hay que tomar mucho líquido“.
“Sin embargo, si hay un estudiante que está acostumbrado a comer un tipo de desayuno en la mañana, y se da cuenta que no tiene efectos adversos…que se alimente. Es muy importante que se alimente y que se alimente lo mejor posible”, argumentó, por lo que el ayuno está completamente prohibido.
Lillo sostiene que es bastante común que los alumnos se queden en blanco, ya que esto se debe al exceso de nerviosismo y a la preocupación. Para combatir esto, admitió que es importante asimilar que es natural y “un buen dato es abandonar esa pregunta, hablar consigo mismo, concentrarse, y decir: vamos a la próxima. Y tratar de comprender la pregunta, es muy importante comprender antes de apresurarte a responder, el tiempo bien utilizado en esta primera etapa es fundamental”, finalizó.
Escucha a continuación la entrevista realizada por Julio César Rodríguez en el Podría Ser Peor:
