La Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) formuló esta semana cargos en contra de Aguas Santiago Norte S.A., empresa sanitaria acusada de vender agua a la minera Anglo American en lugar de depositarlas en un Acuífero de Batuco y llevarla a residentes de la zona, tal como obligaba su Resolución de Calificación Ambiental (RCA).
Los hechos se remontan a 2020, cuando el organismo fiscalizador recibió sendas denuncias de vecinos, agrupaciones medioambientales y el municipio, en contra de la firma a cargo del proyecto denominado técnicamente como “Planta de Tratamiento de Agua Potable y Planta de Tratamiento de Aguas Servidas Hacienda Batuco”.
La iniciativa se ubica a 3,6 kilómetros al oeste de la Ruta 5 Norte en la comuna de Lampa, región Metropolitana, cuya RCA fue aprobada a comienzos de 2014.
El proyecto se desarrolló sin contratiempos hasta que, a inicios de 2020, la Fundación Batuco Sustentable reveló que el 13 de marzo de 2020 los encargados del proyecto comenzaron a vender agua que era transportada por la empresa de capitales extranjeros KDM.
El elemento, según la denuncia, se trasladaba en cuatro camiones aljibes, que -cada tres horas- cargaban 30 mil litros cada uno desde Batuco a Quilicura de día y noche, con origen desconocido.
Lea la primera denuncia:
Cinco días después, la acusación de los vecinos fue respaldada por la Municipalidad de Lampa, entonces representada por la alcaldesa Graciela Ortúzar.
La hoy exjefa comunal relató ante la SMA que personal municipal constató en terreno la extracción y venta de agua industrial mediante camiones que operaban cada 45 minutos y con una carga aproximada de 30 mil litros por camión.
Lea la primera denuncia del municipio:
Algo que la misma casa consistorial ratificaría en septiembre de 2021 bajo una nueva gestión: la del hoy alcalde de Lampa Jonathan Opazo.
La propia autoridad comunal descubrió -producto de una inspección rutinaria- que Aguas Santiago Norte S.A., estaba sacando el elemento fuera de la planta, contraviniendo lo establecido en su RCA.
Todo fue ratificado por el diputado de la zona Gabriel Silber (DC), quien mediante un oficio contó que los vecinos siguieron a escondidas los camiones aljibes y descubrieron que el destino final de las aguas era la minera Anglo American, para su relave de Quilapilún en Colina.
Lea la denuncia del alcalde:
La investigación
Las denuncias presentadas motivaron que en octubre de este año la superintendencia del ramo -en el marco de su indagatoria- pidiera una respuesta formal a Aguas Santiago Norte y realizara una inspección ambiental.
Las conclusiones fueron esclarecedoras: “Como resultado del examen (…) fue posible concluir, por una parte, que se verifica la venta de agua potable, la cual fue retirada por terceros mediante camiones aljibe, hechos acaecidos entre marzo y septiembre de 2021; y por otra, venta de aguas crudas mezcladas, provenientes de pozos y de aguas servidas las cuales fueron retiradas por terceros (…)”.
Los hechos detectados contravienen expresamente lo descrito en la RCA del proyecto, que -claramente- no contemplaba la venta de agua a terceros.
En su lugar, la iniciativa consideraba que las aguas tratadas fueran descargadas en el canal natural de desagüe de la Laguna Batuco, cuerpo de agua que en abril de este año fue declarado Santuario de la Naturaleza por el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad.
En total, según la SMA, fueron más de 2.500 metros cúbicos de aguas tratadas las que no llegaron al cuerpo de agua local y otros 17 mil metros cúbicos de agua de pozo que corrieron similar suerte, al ser vendidas durante 32 días, entre marzo y abril de 2020.
Dicho de otro modo, fueron 674 viajes de camiones del agua tratada y de pozo, extraídas de las instalaciones de Aguas Santiago Norte y trasladadas hasta su destino final, sin las autorizaciones y sectoriales correspondientes.
El drama medioambiental
Lo anterior cobra relevancia, puesto que la no disposición de las aguas tratadas en la Laguna Batuco “genera una merma en la disponibilidad en los cuerpos receptores que componen el Sistema Hidrológico Chacabuco y acuífero Lampa”.
En otras palabras, un desastre ecológico, ya que dicho complejo presenta una alta degradación como consecuencia humana, “donde destacan la agricultura intensiva, la urbanización y la extracción no sustentable de aguas y modificación de cauces”.
Todo ello, redunda en una “reducción importante en sus aportantes hídricos naturales, situación que se ve acrecentada porque entre marzo y abril de 2020, 2.572 metros cúbicos no fueron dispuestos en el canal de regadío autorizado”.
Y peor aun: “la zona de Lampa se ha visto fuertemente impactada por la reducción de precipitaciones que ha afectado la zona central desde el año 2008 (Mega Sequía); siendo éste un factor adicional a las amenazas descritas previamente”, versa el escrito.
Resultados
Con todo, funcionarios de la SMA constataron fehacientemente los hechos denunciados en cuanto a que Aguas Santiago Norte vendió agua potable a terceros, quienes la retiraron mediante camiones aljibes desde el sector denominado La Cachimba.
El volumen transado, detalla la superintendencia, varía según el mes, “alcanzando un máximo de 1.015 m3 en junio de 2021”.
“Esta actividad se realizó entre marzo y septiembre de 2021. El volumen total vendido asciende a 3.768 m3”, detalla la SMA.
En su escrito también aclara que la empresa implementó infraestructura especialmente destinada para la venta de aguas de pozos a terceros.
Otro informe interno de la SMA concluyó, en tanto, que el agua de pozo comercializada alcanzó los 17.678 metros cúbicos. Todo ello, pese a que la compañía -como ya se dijo- no estaba autorizada para la potabilización ni la venta del agua.
Así las cosas, la SMA dispuso de un plazo de 10 días hábiles para presentar un programa de cumplimiento y de 15 días para formular sus descargos.
En diálogo con BioBioChile, el superintendente de Medio Ambiente, Cristóbal de La Maza, se refirió a la situación asegurando que la formulación de cargos es fruto de una exhaustiva investigación que el organismo llevó a cabo en la zona.
“Son dos cargos (los que se formulan), primero que parte de las aguas tratadas fueron vendidas a un tercero sin identificar, son más de 2.500 m3 que se vendieron sin autorización lo que le generó una merma al canal de desagüe de la laguna Batuco durante los meses de marzo y abril de 2020. Y además, durante 2021 pudimos confirmar que también la agua potabilizada estaba siendo desviada a un tercero sin autorización”, detalló.
La autoridad enfatizó en que la formulación de cargos da inicio a la investigación formal que permitirá determinar qué tan significativo fue el impacto medioambiental.
Lea la formulación de cargos:
Respuesta de la empresa
Consultada al respecto, Aguas Santiago Norte S.A. (ASN) hizo llegar a BioBioChile un comunicado con sus descargos, en el que subrayan que los cargos presentados en su contra fueron calificados como leves por la autoridad.
En el documento, la firma reconoce que entre marzo y abril de 2020 vendieron 2.573 m3 de las aguas tratadas en su planta, escudándose en que se trata de una “cantidad muy menor para los procesos de tratamiento de aguas servidas”.
Asimismo, aceptan que de forma esporádica -hasta septiembre de este año- vendieron “agua potable en camiones aljibes para consumo humano o doméstico, destinado a viviendas rurales o campamentos cercanos al sector de nuestras instalaciones en Batuco, en pequeños volúmenes”.
Concretamente y respecto a la formulación de cargos, la sanitaria indica que la “Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), ante denuncia de vecinos realizó un proceso de fiscalización a la venta de aguas, resolviendo formular dos cargos que calificó de leves, concediéndonos un plazo de 15 días para presentar nuestros descargos, en donde demostraremos que no hemos ocasionado ningún daño al medio ambiente y que los procesos de venta de agua cuenta con infraestructura que fue debidamente evaluada ambientalmente”.
Por último, la firma comunicó que respetando la legalidad vigente mantendrán suspendida la venta de agua hasta que se resuelva el proceso que abrió la SMA.
Revise aquí el comunicado completo:
Por su parte, pese al requerimiento de este medio, la minera Anglo American Chile optó por guardar silencio respecto del proceso que la involucra indirectamente.
SMA formula cargos a sanitaria por vender agua a minera en vez de llevarla al Acuífero Batuco
