logo biobiochile
Investiga

Reportajes Entrevistas Artículos De Pasillo Envíanos tu denuncia

Ministra López y daños por lluvias: "Nos vamos a demorar un par de años, por lo menos"

Martes 14 noviembre de 2023 | 06:00

visitas

Rodrigo Sáenz | MOP

Respecto a la incidencia del cambio climático, apunta que a nuestra infraestructura tenemos que darle una vuelta en términos de cómo es resiliente frente a estos eventos de la naturaleza". Por ejemplo, "los embalses mostraron que son no solo para guardar agua, sino que se puede regular bien los caudales", asegura. Aún así, trata de mantener el optimismo, pese a los duros temporales de este invierno: "Son situaciones que yo espero que no se repitan. Es complejo, porque capaz que pase. Los patrones de lluvia han cambiado", subraya.

En entrevista con BioBioChile, la ministra de Obras Públicas, Jessica López, hizo un repaso en torno a la importancia de la infraestructura, ya sea para el desarrollo hospitalario, vial o para afrontar el cambio climático.

A modo de resumen, explica por qué importantes obras, como el Puente Chacao, hospitales y otros se encuentran retrasado y detalla las dificultades para retomar los proyectos cuando las empresas quiebran y abandonan los trabajos. “Como un año. Es mucho tiempo, porque intervienen muchos actores. Es un tema bien complejo, aparte de la cosa técnica propiamente tal”, explica.

Tras un invierno en que la infraestructura estuvo a prueba, sobre todo durante los temporales de junio y agosto, que dejaron millonarios daños, afirma que ya se avanzó bastante, pero queda lo más complicado: “Pronto se va a anunciar el plan de reconstrucción, sobre las obras pendientes que tenemos, y que implica una cantidad bien importante de plata. Nos vamos a demorar un par de años por lo menos”, admite.

Crisis de la construcción

—Frecuentemente se habla de falta de infraestructura, en muchas áreas, pero particularmente en salud ¿Se está avanzando en un plan de hospitales?

Sí, en 2014 se inició un plan de hospitales bien proactivo, usando por primera vez el sistema de concesiones. El sistema de concesiones nos aporta el capital para poder hacer las obras, que en este caso es privado, porque en general la inversión en infraestructura del Estado está en el presupuesto, en este que están discutiendo en este momento en el Congreso. Y ese siempre es limitado, siempre es acotado, entonces permite hacer un conjunto de obras que eran una traba para el desarrollo del país. Y hoy día nosotros estamos construyendo como 18 hospitales concesionados. Son 25 en total. Los otros son directos. Es una tremenda cantidad de infraestructura. Es una cartera grande que yo, te confieso, no dejo sorprenderme por la magnitud de la inversión que se está haciendo. Es impresionante.

—Sin embargo, hay problemas y demoras en obras relevantes como, por ejemplo, el hospital de La Serena y el de Linares ¿Cómo se pueden abordar esas dificultades para evitar tantas demoras?

Mira, hay varias cosas que han ocurrido ahí. Por ejemplo, en el hospital de Puerto Varas, cuando se hace la entrega del terreno y ellos empiezan a hacer las primeras instalaciones en el terreno, aparecen en general los restos arqueológicos, que en nuestro país hay bastantes. Y hay una legislación, unas reglas que nos obligan a parar las obras, a hacer el retiro de esos restos, un estudio, contratar arqueólogos, en fin, un conjunto de protocolos para poder determinar si estos restos arqueológicos son de valor. Estuvimos en el hospital de Buin-Paine, recorriéndolo con la ministra de Salud, tiene un 15% de avance, ahí también se encontraron restos arqueológicos y esto va a concluir haciendo un pequeño museo, porque son muy valiosos. El de Buin se atrasó por eso. Y en Puerto Varas todavía no hemos podido iniciar la obra por eso.

En cambio hay otros como el de La Serena, que lo que nos pasó es que el proyecto que había acordado el MOP con el Ministerio de Salud era como 15.000 metros más grande de lo que finalmente se licitó. Entonces, cuando se licitó y el Ministerio de Salud tomó conocimiento del proyecto que se iba a ejecutar, dijeron: “No po, párenle, este no es el proyecto que nosotros acordamos”. Entonces tuvimos que empezar a revisar la situación con el Ministerio de Salud y a negociar, porque ese hospital ya estaba adjudicado. Estamos en las etapas finales de eso con la concesionaria, para agregar metros cuadrados y acordar en cuánto nos iba a cambiar el presupuesto. Lo de Linares tiene que ver con algo distinto. Lo que pasa es que a raíz de la pandemia, la inflación y los retiros provocaron un aumento en el costo de los materiales de la construcción gigante. Entonces las concesionarias, algunas sonaron nomás, no pudieron seguir. Hemos tenido muchas obras públicas abandonadas por eso. Y entonces nos están pidiendo que les compensemos el mayor costo que significó esta inflación, que llegó a 13%, que fue una locura. Bueno, ahí están en el trámite de negociar el monto y cómo se paga. Es bien surtida la temática.

—Más allá de los hospitales, en el contexto de la crisis de la construcción, muchas obras estaban siendo ejecutadas por empresas que quebraron y abandonaron obras, como Claro Vicuña Valenzuela ¿Se ha avanzado en reasignar esos trabajos a nuevas constructoras?

Sí, hemos avanzado bastante. Es un proceso largo, sí, no hemos logrado acortarlo todavía. Hay un proceso que tiene mucha lógica, pero que toma mucho tiempo: hay que agarrar el contrato y valorizar todo lo que está hecho, hacer una liquidación del contrato, para saber exactamente en qué estado está. Y después hay que volver a llamar a licitación a partir de lo que había y de mantener además eso, porque la infraestructura se deteriora bastante cuando queda abandonada, sobre todo si queda sin cuidado. Sí, nos hemos demorado, en algunos casos hemos podido aplicar razones de emergencia, en otros no, pero sí hemos rehabilitado más de la mitad de los contratos que se han abandonado.

—Y en términos generales, para dimensionarlo ¿Cuánto suele tardar entre que se abandona la obra y se logra efectivamente asignar a otra empresa para que siga?

Como un año. Es mucho tiempo, porque intervienen muchos actores, la Contraloría, siempre hay que tomar razón de los actos administrativos, entonces es un tema bien complejo, aparte de la cosa técnica propiamente tal.

Infraestructura y cambio climático

—Durante el invierno, mucha infraestructura sufrió con los temporales ¿Cuánto de eso ya se ha recuperado? ¿Qué falta aún?

Mire, si lo contamos por número de eventos, finalmente fueron como 900 los del mes de agosto, y naturalmente incluían algunos que habían ocurrido en el evento del mes de junio. Y pasamos del 75% de eso, pero naturalmente hay de distinto tipo, algunos viales, otros de cauce y de distintas magnitudes. Entonces, pronto ya se va a anunciar el plan de reconstrucción, sobre las obras pendientes que tenemos, y que implica una cantidad bien importante de plata. Nos vamos a demorar un par de años por lo menos. Hay mucho enrocado de cauce para la protección fluvial, algunos puentes bien significativos, algunos caminos que quedaron demasiado dañados y que hay que hacer obras mayores.

—¿Se podría decir que está débil la infraestructura para afrontar estas contingencias? En particular este invierno se vieron muchos daños.

Sí, yo creo que los dos episodios que tuvimos no fueron iguales, además. El primero fue muy concentrado en la cordillera, lo que generó caudales gigantes que destruyeron mucho en su camino hacia el mar. Y en el segundo fueron lluvias muy fuertes, no tanto en la cordillera como en el valle, que inundaron mucho y rebalsaron muchos esteros, que no había sido así en la vez anterior. Entonces hubo muchos sistemas de riego dañados, bocatomas. Son eventos que yo espero que no se repitan ni en esta frecuencia ni en esta magnitud. Pero después de dos veces, claro, todos pedimos más protección, todos pedimos más embalses para poder regular los caudales. Los embalses mostraron que son no solo para guardar agua, sino que se puede regular bien los caudales. También todo este tema de enrocar y proteger los bordes de los ríos, porque hay viviendas, hay algunas que no tienen permiso, pero la gente vive ahí. Hubo mucho de eso en O’Higgins, en Maule, en Ñuble.

—¿Estas situaciones responden también a consecuencias del cambio climático, verdad?

Absolutamente, por eso digo que son situaciones que yo espero que no se repitan. Es complejo, porque capaz que pase, porque los patrones de lluvia han cambiado. Esto de que las lluvias ahora son muy violentas y muy concentradas en poco tiempo, y esto está pasando en todo el mundo. Hace algunos meses pasó en Grecia, me acuerdo que la cantidad de lluvias fue tremenda. Llovió como lo que no llovía en un año, en dos días, y acá también fue una cosa como de esa magnitud. Entonces, es el cambio climático. Dijimos siempre que nuestro país era uno de los países más vulnerables, y eso es lo que estamos viendo en situ.

—Ahora los temporales son más duros en invierno y los incendios son más grandes en verano. ¿Qué se está haciendo para reforzar la infraestructura susceptible de sufrir con el cambio climático?

Bueno, mucha prevención. Por ejemplo, hace unos meses se inició el trabajo más proactivo que dirige el Servicio Nacional de Prevención de Riesgos y Desastres, Senapred, con muchos organismos estatales, nosotros entre ellos, con el objeto de prepararnos para lo que creemos que va a ocurrir, que son incendios forestales. Altas temperaturas, si bien llovió bastante en el invierno, eso ha significado que ha crecido mucho pasto, y si no hay más agua, eso va a ser pasto seco muy fácil de prender. Entonces estamos enfrentando un riesgo de incendio que hay que trabajar. Tenemos que hacer mucho para contener el fuego en la orilla de nuestros caminos. Tenemos que asegurar que haya agua suficiente en determinados lugares. Y movilidad. Estamos haciendo una red de puntos de posadas de helicópteros nuevas, de más de 100, porque son claves para los incendios.

Y en infraestructura, está lo de los embalses. Los embalses permiten, cuando tienes buenos pronósticos de lluvia, empezar a vaciar los embalses con anticipación para darle cabida a las lluvias que están pronosticadas, y eso es una forma de prevenir también. Entonces, a nuestra infraestructura tenemos que darle una vuelta en términos de cómo es resiliente frente a estos eventos de la naturaleza.

—¿Qué tan preocupante es el panorama frente a estos nuevos riesgos? ¿Hay estimaciones de la magnitud de lo que eso nos viene?

No sé realmente. Sí sabemos que en el país tenemos una situación de crisis hídrica creciente, y por lo tanto estamos haciendo todo lo necesario para que el ministerio pueda hacer obras hídricas, que sean de múltiple propósito. Esta desaladora que anunció el Presidente en la cuarta región. Hicimos un proyecto de ley corta para habilitar al ministerio a hacer infraestructura hídrica, entre ellas, la desaladora, para múltiples propósitos. Por ejemplo, para que podamos usar desaladoras para el tema de los incendios.

“Estamos tratando de mirar el país de forma bien homogénea”

—Si bien en general se anuncian grandes obras públicas, las regiones siempre se sienten constantemente rezagadas frente a Santiago ¿Qué tan amplia sigue siendo esa brecha?

Nosotros lo que hacemos para levantar nuestra cartera es hacer un análisis en cada una de las regiones. En el norte, por ejemplo, tenemos que terminar la Ruta 5 hasta Arica, por el sur terminar la Ruta 5 hasta Quellón, entre otros proyectos. Entonces, yo creo que estamos tratando de mirar el país de forma bien homogénea, porque además son países muy distintos, el norte, el sur, la zona central, tienen como visiones estratégicas bien distintas respecto de su desarrollo.

—Se lo comentaba, porque, por ejemplo, mientras en Santiago ya se habla de la construcción de un segundo anillo vial, en San Pedro de La Paz aún se ve muy lejos concretar una Costanera Sur, en la ribera del río Bío Bío. En esa clase de proyectos ¿La demora se debe a factores presupuestarios o de evaluación medioambiental?

En la zona sur del Bío Bío hay una situación de crisis vial que es bien importante. Hay una costanera que, te comento que es de administración del Ministerio de la Vivienda y la están fortaleciendo. Está la Ruta 160 que vamos a buscar ampliarle una pista más y también poder mejorar el transporte público. Al final, cuando tú tienes un parque automotriz que se duplica en los últimos 10 años, es redifícil seguirle con la infraestructura a ese ritmo. Y entonces tenemos que preguntarnos qué pasa con el transporte público, porque no podemos seguir puro aumentando el auto. Es lo más ineficiente, lo más dañino para el medioambiente, lo más caro. Pero la gente responde a eso cuando de repente el transporte público no es el apropiado. Tenemos que fortalecer el transporte público y ahí el Ministerio del Transporte está viendo la incorporación de buses eléctricos y nosotros establecer una ruta exclusiva para esos buses eléctricos en la 160.

Ahí hay una situación de crisis que tiene que ver en parte con demora en la construcción de infraestructura y también hubo un tiempo donde había comunidades que no querían hacerla. El río Bío Bío es una zona protegida donde hacer cualquier obra es bien delicado, requiere permisos especiales. En fin, ahí tenemos varios proyectos, pero no hay una solución de corto plazo.

—Usted reconoció que el colapso del colector de aguas lluvias, que dio paso al socavón en las dunas de Concón, fue responsabilidad del MOP ¿Se han analizado posibles compensaciones del Estado a los afectados?

No tenemos considerado compensaciones. Creemos que este colector está ahí y fue necesario construirlo por la urbanización que se ha realizado a lo largo de los años. Este es un colector del año 2005 y lo construyó una empresa privada que hizo un desarrollo inmobiliario. El Ministerio lo autorizó, naturalmente, y posteriormente se siguió urbanizando esta zona dunar. Y ahí, cuando tú tienes una urbanización, estás obligado a asegurar cómo vas a descargar las aguas lluvias. Nosotros estamos a cargo del tema de ese colector. Vamos a repararlo, al igual que el socavón. Pero yo creo que la pregunta es más de fondo, en términos de si debieran haber construido ahí. Pero no tenemos contemplado compensaciones.

“En AVO no manejaron bien la situación inicial de crisis”

—Otra obra con problemas es la Autopista Vespucio Oriente (AVO) ¿El MOP observó las filtraciones desde un principio o fue pasado por alto al momento de iniciar operaciones?

No, esto empezó a ocurrir en el presente año, cuando ya estaba en funcionamiento la autopista. Ahí nosotros acabamos de cursar una multa, porque la compañía no nos informó oportunamente de que esto estaba ocurriendo. Además de otras multas, porque creemos que ellos no manejaron bien la situación inicial de crisis.

—¿Y el problema de las filtraciones quedó resuelto de forma definitiva o va a requerir mantención periódica?

Lo que se resolvió fue canalizar las aguas fuera de las rutas, de manera de poder restituir el servicio. Y eso ya lo hicimos y está funcionando bien. Pero el tema aquí de fondo, que es el análisis que se está haciendo, el estudio que presentó la compañía, es qué es lo que provocó eso ¿Cómo fue que el agua llegó ahí? Y cuáles son las obras que hay que hacer para evitar que eso se repita.

—¿Y eso aún no está del todo claro?

No, hay un informe que estamos estudiando. Lo está viendo la gente que es experta. Y después lo haremos público y vamos a ver qué fue lo que pasó, cuál es la solución que hay que darle.

—¿Se sabe si, por ejemplo, hay riesgo de socavón u otra clase de daño a futuro a raíz de las filtraciones? Porque algunos especialistas hablaban de esa posibilidad.

Los especialistas han hablado de tantas posibilidades que me ponen nerviosa cuando los leo. Esperemos que no.

—Conadecus demandó para buscar compensación a los consumidores ¿El MOP planea hacerse parte o analiza un plan para compensar a los usuarios?

No, no lo tenemos contemplado. Lo que hicimos fue multar a la compañía y además instruirles que cumplieran con el contrato, ya que el contrato establece que cuando se suspenden un par de pistas están obligados a recortar la tarifa, cosa que ellos no habían hecho.

—Para terminar, quiero preguntarle por otra obra icónica, el Puente de Chacao. Algunos parlamentarios de la zona han reclamado por la falta de una fecha clara de entrega ¿Hay estimaciones certeras de cuándo va a estar listo?

No. Estamos revisando el cronograma. Está atrasado, todos lo sabemos. La pandemia hizo lo suyo en términos de… y también el clima, porque realmente hay minutos donde no se puede ir a trabajar. Pero en la próxima sesión de nuestro consejo asesor que tenemos para el Puente de Chacao, yo creo que ya vamos a tener fechas más precisas.

Síguenos en Google News:

Logo Google News

Suscríbete en nuestro canal de whatsapp:

Logo WhatsApp

visto ahora

{{ post.post_category_secondary.name }}

{{ post.post_date_txt }} | {{ post.post_hour }}

visitas

Nuestros comentarios son un espacio de conversación y debate. Recibimos con gusto críticas constructivas, pero nos reservamos el derecho a eliminar comentarios o bloquear usuarios agresivos, ofensivos o abusivos.

Síguenos en Google News:

Logo Google News

Suscríbete en nuestro canal de whatsapp:

Logo WhatsApp