La sobrepoblación en las cárceles y el avance del crimen organizado al interior de ellas es un problema que todos los candidatos y candidatas presidenciales saben que tienen que enfrentar.
Y desde la creación del Ministerio de Seguridad Pública quedó la duda y la pregunta, en el mundo político, si es que Gendarmería de Chile debería dejar de depender del Ministerio de Justicia y estar junto a las policías en Seguridad.
En la actualidad esta institución ya participa en instancias como el comité policial que se realiza todos los lunes. Hay quienes señalan que el problema es tan grande y Gendarmería requiere de tantos cambios que se decidió no incluirla en la discusión del proyecto de ley que formó el Ministerio de Seguridad. Por la simple razón de que este tema podría haber atrasado la discusión parlamentaria.
Por lo mismo, es una discusión que será parte de los debates presidenciales. ¿Que ideas tienen los candidatos y candidatas para Gendarmería? ¿Es importante hacer cambios? ¿Debe depender de Seguridad? Radio Bío Bío conversó con los distintos comandos y obtuvo las propuestas de cada uno.
Sin embargo, Marco Enriquez Ominami decidió no participar en la nota porque él dará a conocer sus propuestas el 22 de septiembre.
José Antonio Kast
Desde el entorno de José Antonio Kast respondieron que “debemos señalar que en el Chile de hoy, enfrentamos un problema de alta complejidad como los son, las organizaciones criminales, nuevas y diversas formas delictuales, mayor uso de la violencia, narcotráfico, asesinatos, delitos extorsivos, secuestros, sicariatos y una lista extensa de delitos complejos que como sociedad no estábamos acostumbrados”.
Para esto, el estado requiere de “una acción decidida para avanzar en múltiples medidas para vencer el flagelo de la delincuencia y considerando que por experiencia comparada los recintos penitenciarios han sido la cuna del surgimientos de importantes organizaciones criminales incluso de carácter transnacional, como el PCC y Comando Vermello Brasileño, Tren de Aragua Venezolano y otros tantos que podríamos enumerar y que siguen funcionado, administrando su negocio ilícito y dando órdenes desde el interior de los recintos”.
El plan del candidato Republicano “reconoce el rol fundamental de Gendarmería en la seguridad de nuestro país, tanto por el control de los recintos penitenciarios, como por su rol rehabilitador, elementos que debemos fortalecer. Para lograrlo, debemos trabajar de la mano con la Institución y sus funcionarios”.
Explican que ellos van a tener “tolerancia cero a la corrupción, fortalecimiento institucional y mejores condiciones para los funcionarios. La inmensa mayoría es honesta y valiente, son los que hoy sostienen un sistema relegado por el estado de Chile, nuestro plan es con ellos y para ellos”. Y que esta termina “con medidas de control interno, potenciaremos los Departamentos de Inteligencia e Investigación Criminal, crearemos canales seguros de denuncia con proceso que discriminen denuncias mal intencionadas, se generarán procesos eficientes respecto de los Sumarios Administrativos, auditados que aseguren el debido proceso pero que a su vez las diligencias se efectúen en tiempos acotados especialmente los relacionados con faltas a la probidad administrativa, para esto se generará un sistema de control de gestión de sumarios con alertas preventivas respecto a la tramitación y plazos”.
También “generaremos la estrategia para proteger la identidad de los funcionarios, tanto al interior de los penales como en otros espacios en que realicen sus labores, porque ejemplo, cuando un funcionario en el cumplimiento de su función denuncie un ilícito cometido por parte de la Población Penal, en la documentación que informa el hecho no aparecerá su nombre en su reemplazo se asociará un código”.
Finalmente “vamos a entregar todas la herramientas y apoyo a Gendarmería, cero tolerancia a la corrupción, tecnología y controles reales, protección y mejor carrera para los funcionarios y una institución a la que se le reconoce su rol en el resguardo de la seguridad de nuestro país. Esto es con los gendarmes que cumplen con sus funciones, que por años han sostenido el sistema, y se merecen tener el respaldo del Gobierno y el Estado de Chile”.
Jeanette Jara
De igual forma, desde el comando de la candidata del oficialismo, Jeanette Jara, señalaron que “nuestra propuesta apunta a modernizar la institución en distintas escalas. Primero transformar la Escuela de Gendarmería en una institución de educación superior, con el fin de asegurar una formación continua y especializada para todo el personal. Se busca profesionalizar al personal con dotaciones adecuadas a la población penal y sus proyecciones futuras, además de separar las funciones de seguridad y reinserción para una gestión más eficiente. En cuanto a las condiciones laborales, buscamos garantizar condiciones dignas con estabilidad y oportunidades de desarrollo, favoreciendo un equilibrio entre la vida laboral y personal de los gendarmes. Se implementará una política de salud mental permanente para el personal penitenciario, con el apoyo de instituciones como el Servicio Civil y Senda. Creemos que es importante pensar en las personas que están detrás de estas funciones tan críticas y que a veces se ven expuestos a jornadas laborales de mucho estrés psicológico?”.
Agregaron que es “importante fortalecer las unidades encargadas de investigar y sancionar las conductas indebidas, porque aquí lo más importante es que se cumplan las leyes y normas vigentes. Los gendarmes tienen una presión alta y un trabajo difícil, que se ha vuelto cada día más complejo. Entonces nosotros estamos por modernizar la institución para que puedan optar a una formación continua que les de oportunidades de desarrollo”
Sobre la permanencia de Gendarmería en el Ministerio de Justicia, explicaron que “es una discusión interesante, porque por un lado sería atribuirles funciones al Ministerio de Seguridad que no fueron consideradas ni concebidas cuando se creó la institución, porque sería el traspaso de todo el sistema pos penitenciario, es decir, no es solo mover de aquí para allá. Además, Gendarmería no es un cuerpo de orden y seguridad, su labor es asistir y vigilar a la población penal en virtud de la reinserción social. Entiendo que podamos dialogar, sobre todo teniendo en cuenta principalmente la visión de las y los funcionarios de Gendarmería, pero a decir verdad, sus funciones tienen directa relación con los objetivos del Ministerio de Justicia y DD.HH”.
Evelyn Matthei
La propuesta de la candidata de Chile Vamos, Evelyn Matthei, fue enviada por el equipo programático de seguridad.
En el escrito indican que “se debe avanzar en la profesionalización y especialización del personal. En esta dimensión, el rol de la Escuela de Gendarmería constituye un eje estratégico fundamental. Contar con más funcionarios y con una preparación de mayor calidad resulta un factor determinante”.
En relación a la población penal, “además de uniformarlos como una medida de control y evitar las HH en procesos de ingreso y reducir carga combustible, es indispensable rediseñar varios procesos, entre ellos el régimen de visitas actualmente vigente. Si bien todo privado de libertad tiene derecho a visitas, en el caso de los cabecillas del narcotráfico y el crimen organizado —que no deberían superar el 3% de la población penitenciaria— estas deben restringirse exclusivamente a través de locutorios especialmente acondicionados. Dichos encuentros deben limitarse a familiares directos y quedar sujetos a registro audiovisual (imagen y sonido) en tiempo real, bajo la supervisión de personal especializado en salas de seguridad. En caso de detectarse comunicaciones destinadas a la comisión de delitos o amenazas, estas deberán interrumpirse de inmediato, dejando constancia formal y remitiendo los antecedentes al juez de garantía”.
También apuntan a la necesidad de “protocolos estrictos y apoyo tecnológico de última generación, junto con procedimientos especializados cuya naturaleza no siempre puede ser de conocimiento público, a fin de asegurar un control real y efectivo sobre estos internos de alta peligrosidad”. Y que estos “deberán permanecer en celdas individuales de alta seguridad, evitando cualquier interacción con otros internos que puedan ser objeto de coerción o utilizados como correos humanos. Asimismo, el personal de trato directo deberá portar cámaras corporales operativas las 24 horas, registrando toda interacción con el interno, siempre bajo el principio de actuación en binomios (dos funcionarios por cada convicto)”.
En relación a las cárceles, señalan que “se utilizarán sistemas constructivos industrializados y modulares, ya implementados en otros países, que han demostrado reducir significativamente los plazos de edificación sin comprometer los estándares de seguridad. Sin embargo, aun considerando la modalidad fast track, la materialización de cinco recintos —incluidos tres de alta seguridad— en un horizonte de tres años constituye un desafío de gran envergadura”.
Franco Parisi
Desde el equipo del candidato del Partido de la Gente, Franco Parisi, entregaron a la Radio su propuesta para Gendarmería.
Las que son: En primer lugar, “el mejoramiento de infraestructura de las unidades penales. Dependencias que utilizan funcionarios para pernoctar, áreas administrativas donde desempeñan sus funciones, casinos dónde almuerza el personal, mejorar la entrega de recursos para una buena alimentación del personal. Actualmente se entregan más recursos económicos en esta materia para internos que para funcionarios”.
También la “incorporación de los vehículos de Gendarmería de Chile a la ley de tránsito como vehículos de emergencia” y “proyectos de ley como la tenencia y porte de armas para funcionarios en retiro de Gendarmería de Chile. Con regulación especial (Boletín N° 13.478-02”.
De igual forma, “incluir a funcionarios de Gendarmería para hacer uso gratuito de la locomoción colectiva al igual que Carabineros (Art. 186 Ley de Tránsito)” y “modificación del Reglamento de Establecimientos Penitenciarios (D.S. N° 518/1998) para incorporar una infracción específica en el Título IV sobre régimen disciplinario, sancionando el intento de ingreso de objetos mediante lanzamiento desde el exterior. Permitir que Gendarmería registre y denuncie estos hechos como faltas graves, activando protocolos de persecución penal”.
Quieren “proponer una reconversión desde audiencias presenciales hacia las de tipo online para los internos. Se busca disminuir escalonadamente los traslados que resultan ser puntos de vulnerabilidad para escape, exposición de los gendarmes a situaciones peligrosas, y el gasto que comprende el traslado” y la “ prohibición de figuras como ‘el mozo’, los internos que son catalogados como ‘buenos’ muchas veces les cocinan a los funcionarios”.
Johannes Kaiser
Por parte del comando del candidato Nacional Libertario, Johannes Kaiser, expresaron que “la situación penitenciaria en Chile es insostenible: cárceles sobrepobladas, convertidas en “universidades del delito”, y una Gendarmería debilitada. Proponemos una reestructuración profunda para que recupere el control interno, con nuevas herramientas, formación y respaldo político”.
Específicamente plantean que “Gendarmería pasará al nuevo Ministerio de Seguridad y Defensa, que integrará a Carabineros y la PDI. Reduciremos de 25 a 9 ministerios, porque Chile necesita un Estado más ordenado y con toda su fuerza concentrada en derrotar al crimen organizado. Combatiremos la corrupción separando internos peligrosos, construyendo cárceles modernas y aplicando sanciones inmediatas”.
Añaden que “exigiremos que todos los reos vistan uniforme y que Gendarmería porte armas en el ejercicio de sus funciones. Además, la institución será reconocida en el Capítulo XI de la Constitución como fuerza de orden y seguridad pública y será dirigida por profesionales de carrera, mejorando también las condiciones laborales para sus funcionarios”.
Eduardo Artés
Para Eduardo Artés la corrupción está en todas las instituciones del Estado y también en la sociedad. “Todas las instituciones del Estado tienen corrupción, y no solamente el Estado, la sociedad entera está basada en la corrupción, porque el neoliberalismo y el capitalismo es eso, es corrupción permanente. Mientras exista, digamos, lo privado como esencial, va a haber corrupción, y eso va a durar larguísimos períodos en la historia de la humanidad, sin duda”.
Y más que un cambio solo a Gendarmería, “hay que tomar medidas concretas, y hay que cambiar de raíz la orientación del Estado” pero “sí, tienen que haber sindicatos en lo interno de los gendarmes. Incluso si los sindicatos tienen una vida potente, democrática, interna, también eso ayuda a combatir la corrupción, porque los sindicatos dan moralidad y dan también una posibilidad concreta de cambios, de transformaciones y de combate a aquellas prácticas que hacen daño al gremio. Así que nada, en ese sentido no hay por dónde verlo”.
Tiene claridad de que Gendarmería se debería mantener en el Ministerio de Justicia pero “también hay que hacer alguna transformación en justicia, sin duda. Así que mi opinión es que debe continuar con el sindicato, que la corrupción es inherente al sistema en que vivimos y que, por lo tanto, no puede verse como algo en sí de gendarmería. Es parte de todo el sistema corrupto”.
Harold Mayne-Nicholls
Desde el comando del ex presidente de la ANFP, Harold Mayne-Nicholls, explicaron que el desafío es “convertir las cárceles desde focos de reincidencia y escuelas del delito, a espacios efectivos de rehabilitación y reinserción”.
Y las medidas que mencionaron fueron: En primer lugar, “nuevos programas de reclutamiento, selección y formación para enfrentar al crimen organizado”. También la “ampliación de la infraestructura carcelaria, con el objetivo de reducir el hacinamiento y tener espacio efectivo para el cumplimiento de condenas. Esto implica construir o reconvertir recintos modulares y de máxima seguridad con capacidad ampliada, para cumplir estándares internacionales de no sobrepoblación. Para ello hay que superar las trabas burocráticas y usar construcción acelerada”.
En tercer lugar, la “incorporación de tecnovigilancia, bio-identificación y plataformas digitales integradas con tribunales, para modernizar la gestión penitenciaria. Esto permitirá: Más seguridad (aumentar la capacidad de control sin depender exclusivamente de más personal); Eficiencia (reducir costos operativos y errores administrativos); Transparencia y trazabilidad (dificultar la corrupción interna, al quedar todos los movimientos y decisiones registrados digitalmente)”.
Finalmente el fortalecimiento de las unidades anticorrupción dentro de Gendarmería con auditorías, protección a los denunciantes y transparencia.