Fuertes olores putrefactos complican a familias, turistas y dueños de establecimientos de alojamientos en plena costanera de Ancud, en la región de Los Lagos.
El problema de contaminación ambiental reapareció con fuerza durante los últimos días y se incrementa con las altas temperaturas.
Una situación vivida hace dos años donde se ha comprobado la presencia de descargas ilegales de aguas servidas y una fuerte concentración de algas en el borde costero.
Esta materia fue inspeccionada el martes por funcionarios de la Capitanía de Puerto, autoridad sanitaria, municipio y la Superintendencia de Servicios Sanitarios.
El presidente de la Asociación de Turismo de Ancud, Óscar Vargas, acusó que el problema por los fuertes olores no es algo nuevo y que complica a los residentes de la costanera.
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A su vez el encargado de la oficina de la Superintendencia de Servicios Sanitarios (SISS), Ricardo Zavalla, dijo que como entidad prestan atención en el funcionamiento de una planta elevadora que tiene Essal en el lugar.
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La inspección a escasos metros del foco de contaminación confirmó la detección de una descarga ilegal de aguas servidas, tal como lo explicó Zavalla.
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Entre otras medidas, el municipio ya destinó maquinaria pesada para remover la masa de algas putrefactas y así tratar de minimizar las fuertes concentraciones de gases que incomodan a transeúntes y dueños servicios hoteleros de la costanera.