Autorizan extradición a Venezuela de sicario del Tren de Aragua y Fiscalía de Tarapacá apela la medida

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La ministra de la Corte Suprema, Cristina Gajardo, acogió la solicitud de extradición de Venezuela, de un hombre sindicado como “Satanás”, a quien le atribuyen ser “un temido sicario del Tren de Aragua”, que está en prisión preventiva en Chile.

La fiscalía regional de Tarapacá apeló a la resolución insistiendo en que tiene que cumplir su eventual condena en nuestro país antes de volver a Venezuela.

Es apodado como Satanás con tan sólo 25 años porque -según medios internacionales-, no hay más sanguinario que él en la banda criminal internacional “Tren de Aragua”.

Se trata de Hernán David Landaeta Garlotti, quien fue requerido por Venezuela y la ministra de la Corte Suprema, María Cristina Gajardo acogió la solicitud de extradición.

A los 18 años el joven ya tenía diversas causas en su país, entre ellos homicidios principalmente a policías venezolanos y de hecho era llamado “el matapolicías”.

En 2016 Landaeta estaba preso en la cárcel de Tocorón al sur de Aragua por diferentes delitos, entre ellos el conocido como sicariato. En ese penal activó nada más ni nada menos que dos granadas que dejó a fallecidos y que permitió su huída.

Con una identificación falsa ingresó a Perú, fue detenido por el delito de homicidio frustrado en ese país y a pesar de tener medidas cautelares tras su formalización, huyó de ese penal y llegó a Chile por un paso irregular.

Medios internacionales revelaron que el perfil de este hombre es ser “irreverente, desafiante, audaz y que usa la intimidación para fines personales”. Junto con eso, el venezolano a través de redes sociales posteaba sus armas de fuego.

La ministra del máximo tribunal, Cristina Gajardo, afirmó que acoger su solicitud de extradición no implica dejarlo sin sanción y no es que se esté perdonando al requerido en Chile.

El fiscal nacional, Ángel Valencia aseguró que no están de acuerdo con la resolución de Gajardo, por lo que apelaron a la decisión.

Tras la apelación, será la segunda sala de la Corte Suprema, correspondiente a la penal, quien ponga punto final.

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La ministra de la Corte Suprema, Cristina Gajardo, acogió la solicitud de extradición de Venezuela, de un hombre sindicado como “Satanás”, a quien le atribuyen ser “un temido sicario del Tren de Aragua”, que está en prisión preventiva en Chile.

La fiscalía regional de Tarapacá apeló a la resolución insistiendo en que tiene que cumplir su eventual condena en nuestro país antes de volver a Venezuela.

Es apodado como Satanás con tan sólo 25 años porque -según medios internacionales-, no hay más sanguinario que él en la banda criminal internacional “Tren de Aragua”.

Se trata de Hernán David Landaeta Garlotti, quien fue requerido por Venezuela y la ministra de la Corte Suprema, María Cristina Gajardo acogió la solicitud de extradición.

A los 18 años el joven ya tenía diversas causas en su país, entre ellos homicidios principalmente a policías venezolanos y de hecho era llamado “el matapolicías”.

En 2016 Landaeta estaba preso en la cárcel de Tocorón al sur de Aragua por diferentes delitos, entre ellos el conocido como sicariato. En ese penal activó nada más ni nada menos que dos granadas que dejó a fallecidos y que permitió su huída.

Con una identificación falsa ingresó a Perú, fue detenido por el delito de homicidio frustrado en ese país y a pesar de tener medidas cautelares tras su formalización, huyó de ese penal y llegó a Chile por un paso irregular.

Medios internacionales revelaron que el perfil de este hombre es ser “irreverente, desafiante, audaz y que usa la intimidación para fines personales”. Junto con eso, el venezolano a través de redes sociales posteaba sus armas de fuego.

La ministra del máximo tribunal, Cristina Gajardo, afirmó que acoger su solicitud de extradición no implica dejarlo sin sanción y no es que se esté perdonando al requerido en Chile.

El fiscal nacional, Ángel Valencia aseguró que no están de acuerdo con la resolución de Gajardo, por lo que apelaron a la decisión.

Tras la apelación, será la segunda sala de la Corte Suprema, correspondiente a la penal, quien ponga punto final.