La Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputadas y Diputados, iniciará hoy el trámite de la Reforma Tributaria, pese a que la iniciativa aún no ingresa al Congreso.
El impuesto al patrimonio, el detalle de la eliminación de exenciones, políticas pro empleo e inversión, y las medidas para evitar la elusión, estarán en el centro del debate entre el Gobierno y la oposición.
Dos parlamentarios de derecha conversaban en un pasillo del Congreso Nacional, que la reforma tributaria se va a comenzar a tramitar por trascendidos de prensa.
Medio en broma medio en serio, estos diputados se referían al anuncio que hizo el Presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputadas y Diputados, Jaime Naranjo, al señalar que comenzarán el estudio de la reforma tributaria, sin importar si el proyecto ingresa al congreso esta jornada.
Hay todo un debate sobre por qué aún no ingresa. Voces del Frente Amplio, diputados que incluso almorzaron el lunes con el ministro Mario Marcel, aseguran que es solo un tema de compaginar y dar forma al documento, mientras que en la oposición aseguran que en Hacienda están hasta última hora haciendo cambios.
Lo cierto es que si bien el diálogo social y técnico, acompañado de varias propuestas de consenso son un piso ganado para el Gobierno, existen pequeñas y grandes aprehensiones sobre la reforma que busca financiar cerca de la mitad del Programa de gobierno.
Partiendo por ahí, el diputado RN de la comisión de Hacienda, Frank Sauerbaum, advierte que el 1.6 del PIB que se pretende recaudar por vía de las políticas anti evasión y elusión, es muy optimista y comete el mismo error de reformas tributarias anteriores: No considera que las crisis económicas y la falta de medidas pro-inversión y pro-empleo, siempre dañan la proyección de los gobiernos.
Para cada pregunta, los diputados oficialistas parecen tener una respuesta. Aseguran que la confianza en recaudar en régimen por sobre los 4 puntos del PIB, está justificada principalmente, en que para recaudar con la creación de impuestos como el de los súper ricos, o desintegrar el sistema tributario, se necesita fortalecer a las instituciones.
Una de las piedras de tope que tuvo la creación de un impuesto al patrimonio, que afectaría solo a 7 mil personas en Chile, fueron los problemas de dotación, tecnología y presupuesto del Servicio de Impuestos Internos.
La diputada de Convergencia Social y única mujer en la comisión, Gael Yeomans, aseguró que una política contra la elusión y una recaudación efectiva de impuestos progresivos, depende del funcionamiento de las instituciones.
La derecha en la comisión tiene un frente unido, y después de escuchar las presentaciones del gobierno esta semana, irá por una batería de cambios que buscan ajustar y evitar posibles daños en las propuestas del ejecutivo.
Aseguran por ejemplo, que la línea base de las 75 mil UF anuales para el tributo de las empresas podrá ser eventualmente sorteado por la creación artificial de pymes dentro de las grandes empresas, y que la desintegración demuestra que quienes hicieron la reforma, nunca han emprendido en su vida.
El partido republicano tendrá un voto y lo usará para resistirse sin medidas a algunos de los elementos de la reforma. El diputado Gonzalo de la Carrera, dijo que el gobierno no hizo gestos en la reducción de gastos del Estado, y que el impuesto a los súper ricos es injusto.
Como tantas otras veces en el pasado, la postura de la DC será clave. Desde esa bancada ya adelantaron que objetarán que el impuesto al patrimonio no afecte a sectores profesionales, que se tengan reservas en las exenciones tributarias que afectan el mercado inmobiliario, y que se considere el litio dentro del royalty minero.
Ricardo Cifuentes, representante de la falange en la comisión, dijo que la división de la reforma en pilares que se tramitarán en distintos plazos y en distintas cámaras genera dispersión, y dijo que el rol de su partido será velar porque la reforma no afecte a la clase media.
El gobierno asegura que sí habrá pacto tributario, certidumbre para la inflación, y una proyección precisa de las mejoras para la clase media, y sobre el DFL2, parlamentarios de gobierno creen que se hará la distinción entre quienes tienen muchas viviendas, y los adultos mayores que tienen un solo arriendo para amortiguar sus bajas pensiones.
Habla también de un estudio interno del ministerio, y de un estudio externo del Banco Mundial para calcular los efectos distributivos, que eventualmente traerá la reforma. No olvidar que esta es, así como está planteada, la reforma tributaria más ambiciosa desde el retorno a la democracia.
En resumidas cuentas, el impuesto al patrimonio, el detalle de la eliminación de exenciones, incluir políticas pro empleo e inversión y las medidas reales para evitar la elusión, estarán en el centro del debate que esta tarde, proyecto ingresado o no, tiene su primera sesión.