Para hoy está citado a declarar, en calidad de inculpado, el excomandante en jefe del Ejército, Ricardo Martínez, en el despacho de la ministra Romy Rutherford.
La defensa del general en retiro interpuso -sin éxito- diversas acciones legales para frenar el interrogatorio.
Ricardo Martínez podría sumarse hoy a la lista de los excomandantes en Jefe del Ejército procesados por delitos de corrupción en medio del fraude en la institución castrense. Esto, porque deberá llegar a eso de las 9:00 de la mañana al despacho de la ministra Romy Rutherford, pese a que intentó frenar la diligencia en múltiples ocasiones.
La jueza investiga el caso conocido como fraude en el Ejército, o también llamado Milico Gate, la que tiene 1.392 volúmenes y 46 cuadernos, con diversas aristas, una de ellas “Pasajes y Fletes”, donde la jueza pesquisa a quienes habrían hecho uso irregular del dinero asignado para viajes oficiales de integrantes de la repartición castrense.
Y justamente por esta arista es requerido Ricardo Martínez Menanteaux.
Fue el 2 de marzo, en la cuenta pública del Ejército -a una semana de entregarle el cargo a su sucesor, Javier Iturriaga, que Martínez renunció a su cargo, insistiendo en su inocencia, y cuestionando a la justicia militar, a la que nunca antes se había referido.
Al día siguiente estaba citado en el despacho de la jueza en calidad de inculpado por la arista pasajes, sin embargo no llegó y desde ese día, fueron múltiples los recursos que interpuso ante la Corte Marcial, Suprema y el Tribunal Constitucional para suspender la diligencia, pero no obtuvo éxito.
Su abogado defensor, Juan Carlos Manríquez, confirmó la citación y sostuvo que los fallos de los tribunales se acatan y se cumplen.
Quien también se refirió al caso fue el diputado de Revolución Democrática, Jorge Brito, miembro de la Comisión de Defensa de la cámara baja, quien valoró que los recursos hayan sido rechazados en su gran mayoría.
Si bien eran dos las peticiones de Martínez, una de ellas no era tan descabellada, que era que declarará en su casa como incluso lo hizo su antecesor Humberto Oviedo.
Lo que era inédito es que el general en retiro quería declarar con su defensor presente, lo que no es posible según la justicia militar.
Recordemos que los antecesores de Martínez, Humberto Oviedo, Juan Miguel Fuentealba y Óscar Izurieta Ferrer, están procesados por delitos de corrupción.