Un error de cálculo en las tarifas eléctricas desató la indignación ciudadana y política. La Comisión Nacional de Energía (CNE) reconoció que durante 2024 y 2025 se cobró en exceso a los usuarios por una inconsistencia metodológica al aplicar dos veces el IPC en el cálculo de la deuda con las generadoras eléctricas.

Un problema técnico que hoy se traduce en millones de dólares cobrados de más a los consumidores.

La revelación del informe encendió los ánimos. En el programa Podría Ser Peor de Julio César Rodríguez calificó el hecho como “un acto digno de una película tragicómica”, mientras el experto Javier Piedra Fierro, director de la Fundación Energía para Todos y docente de la Universidad de Concepción, explicó que la falla se produjo al actualizar la deuda del congelamiento tarifario de 2019: “Aplicaron el IPC dos veces, como que trajeron doblemente el valor presente, y eso generó un cobro mayor del que correspondía”.

El error implica que las generadoras recibieron más dinero del que debían, y aunque la responsabilidad recae en la CNE (dependiente del Ministerio de Energía), Piedra cuestionó también la falta de reacción del sector privado: “A las generadoras se les dijo que se les debía 100 cuando en verdad se les debía 80. Y nadie dijo nada”.

La situación revive la desconfianza en la gestión del sistema eléctrico. “Si se equivocan en esto, ¿cuántas veces se habrán equivocado en otras cosas?”, se preguntó Julio César en el programa.

El experto coincidió y recordó el caso revelado por Ciper, donde se descubrió que las compensaciones por cortes de luz eran pagadas por los mismos clientes. “Nos suben la cuenta a través de leyes y nos bajan la cuenta a través de errores”, señaló, enfatizando la falta de control y supervisión estatal.

El error, que costó cerca de 120 millones de dólares, será corregido con una rebaja menor en las cuentas a partir de enero, según informó la CNE. Pero para muchos, el daño ya está hecho: no sólo por el dinero cobrado de más, sino por la pérdida de confianza en un sistema que, una vez más, parece no rendir cuentas.