El fiscal persecutor del caso Nabila Rifo y exfiscal regional de Aysén, Pedro Salgado, se refirió a la libertad condicional otorgada a Mauricio Ortega, condenado por la brutal agresión contra su expareja en 2016. Ortega fue sentenciado inicialmente a 26 años de cárcel por lesiones graves, gravísimas y femicidio frustrado, pero la Corte Suprema rebajó la condena a 18 años tras eliminar el último delito. Ahora, al cumplir la mitad de la pena, obtuvo el beneficio de libertad condicional, lo que ha generado indignación pública.
Salgado recordó que la investigación del caso fue extensa y compleja, desarrollada durante un año en Aysén con recursos limitados. “Hubo un gran trabajo de carabineros y peritos para construir una investigación sólida. Este caso marcó un antes y un después en la legislación sobre violencia intrafamiliar”, señaló. El exfiscal reconoció que la noticia lo sorprendió y que, sobre todo, le preocupa la revictimización de Nabila Rifo: “No he podido dejar de pensar en ella, porque vuelve a sufrir con todo esto”.
Respecto a los cuestionamientos por el beneficio, explicó que la Comisión de Libertad Condicional evalúa los antecedentes en base a informes de Gendarmería, aunque estos no son vinculantes. “La normativa actual exige cumplir ciertos mínimos para delitos violentos, pero el caso de Ortega no quedó dentro de esos marcos tras la recalificación de la Corte Suprema”, aclaró. Finalmente, reiteró que el Ministerio Público siempre sostuvo que existió la intención de matar. “Nosotros acreditamos un femicidio frustrado, pero la Corte entendió algo distinto. Hoy la víctima vuelve a revivir un dolor que creíamos cerrado”, concluyó.