Se trata de la principal causa de discapacidad visual en niños de entre 5 y 8 años.
“Este dato también afecta a Chile pese a no tener una cifra como tal. Sin embargo, el número de consultas ha aumentado en estos últimos años” comenta el Oftalmólogo Sergio Tabilo.
Los nativos digitales se han visto afectados tras pasar sus primeros años frente a una pantalla. Esto afecta al crecimiento natural del ojo y puede causar mayores problemas en la edad adulta.
“Las madres se preocupaban por lo que parecía ser un mito urbano, sin embargo se ha comprado que el uso de estos dispositivos realmente provoca miopía y afecta el crecimiento del ojo aumentando los riesgos de padecer este problema. Estos niños pueden presentar cuando adultos cataratas y más patologías derivadas”
Al hablar de niños muy pequeños, las señales e indicios que pueden indicar problemas son:
“Antes de los 4 años es muy complicado saber; a veces ocurre que un ojo es distinto del otro pero en adelante el niño se queja, se acerca demasiado a la pantalla y muchas veces son los profesores quienes están al tanto de este tipo de señales” asegura.
El profesional también advierte sobre cómo la invasión tecnológica logra adelantar este tipo de problemas en la vista a diferencia de generaciones anteriores que no estaba expuestas tantas horas a pantallas.
La miopía sin embargo, es tratable y se puede intervenir cuando se diagnostica. Existen dos medidas aplicables: uso de gotas específicas durante la noche en ambos ojos además del uso de lentes de contactos especiales que los niños pueden usar durante el día para retardar el efecto miope.
Otros factores importantes para la incidencia de la miopía claramente es la genética; sin embargo retrasar o restringir varias horas el uso de pantallas tecnológicas en niños que se encuentran en edad de formación es una retórica lógica de prevención.