Un día como hoy, pero hace 53 años, Richard Davis solicitó la patente por el chaleco antibalas.
un repartidor de pizzas de detroit
pidió la patente por el chaleco antibalas la protección corporal contra balazos es algo muy antiguo ya el año 1538 francesco maría de la rovere encargó a filipo negroni crear un chaleco a prueba de balas el año 1561 maximiliano segundo puso a prueba su armadura contra un arma de fuego el primer chaleco anti balas liviano fue inventado en corea el año 1860 un tiempo después de la campaña francesa contra corea estaba compuesto por 30 capas de algodón y el primer empleo de protección anti balas del cual se tiene constancia tuvo lugar en 1879 cuando una banda de prófugos australianos dirigida por net kelly fabricó armaduras a partir de chatarra pero esos trajes artesanales pesaban 44 kilos volvamos a nuestro personaje richard davis era un ex marín estadounidense que el 21 de julio del año 1969 después de haber abierto hacía poco una pizzería fue asaltado cuando hacía una entrega en una zona peligrosa de detroit la dirección marcada conducía a un oscuro callejón donde fue atracado a punta de pistola estaba todo planeado pero la cosa no quedó ahí porque unas semanas más tarde recibió el mismo pedido con la misma dirección así es que decidió ir preparado preparado con una pistola efectivamente se trataba de los mismos ladrones por lo que davis contra atacó y acabó recibiendo varios disparos en una pierna uno muy cerca de la 100 lo que le dejó en el hospital durante varias semanas ese hecho hizo pensar a richard en una manera de darle a la gente en especial a los policías una segunda oportunidad frente a las armas de fuego como contábamos los chalecos antivales no eran nada nuevo pero davis intuía que podía fabricar algo más ligero y que pudiese llevarse bajo la ropa sin que fuese detectado así que tomó un rollo de nylon y las correas de los cinturones de seguridad de su vehículo para crear el primer diseño de un chaleco antibalas que pudiese ser escondido bajo la ropa lo hizo en el garage de su casa una vez que estuvo seguro de que su idea era efectiva y de pasar largas horas cosiendo a mano los chalecos blindados y haciendo pruebas realizó una gira por los departamentos de policía de detroit haciendo demostraciones en vivo pegándose él directamente un tiro en el pecho para demostrar que la tecnología funcionaba richard davis acabó disparándose en el pecho unas 190 veces de esta forma el 8 de mayo de 1972 pidió la patente para su invención que decía textual armadura protector antibalas que comprende una almohadilla flexible formada por varias láminas de tela con una o dos docenas dispuestas cara a cara y unidas por el borde sin que las láminas estén prácticamente sujetas entre sí para permitir la flexión relativa de cada una dicha tela está hecha de un material de tejido apretado formado por hilo de nylon grueso y medios para colocar y sujetar la almohadilla sobre el objeto a proteger a fin de detener las balas y proyectiles similares que impacten contra ella recién el 8 de enero de 1974 casi dos años después de la solicitud le fue concedida la patente con el número 3.783.449 ese mismo año 1974 la compañía química Dupont anunció que había inventado una fibra sintética liviana y cinco veces más fuerte que el acero llamada Kevlar así es que Richard Davies patentó en agosto de ese año su segundo diseño de chalecos antibalas esta vez fabricados con Kevlar una fibra que es el 230% más fuerte que el nylon que había usado originalmente posteriormente instaló una fábrica la que llamó armadura corporal de segunda oportunidad en honor a la suerte que tuvo de mantenerse con vida en aquel tiroteo en Detroit. Esa firma pasó a convertirse después en un negocio de 50 millones de dólares al año era una de las firmas más importantes de Detroit aunque posteriormente en 1998 Richard Davies se tuviera que enfrentar a la bancarrota después de la introducción de un nuevo tipo de chaleco que elaboró con Xylon una fibra sintética de altas prestaciones pero resultó que el Xylon era mucho menos eficaz que el Kevlar y después de la muerte de un policía que usaba un aparato hecho con Xylon las agencias de seguridad norteamericanas concluyeron que esos chalecos no cumplían con los estándares requeridos y podían ser defectuosos y eso significó un golpe económico brutal para el negocio la bancarrota. El año 2005 la empresa segunda oportunidad Second Chance fue adquirida por Armored Holdings que a su vez la vendió a un conglomerado de arremento británico.