El agente chileno ante La Haya, José Miguel Insulza, se refirió a la última polémica levantada por el presidente boliviano Evo Morales, que acusó a Chile de instalar una base militar en la frontera.

Al respecto, el exsecretario General de la OEA aclaró que la instalación a la que hace referencia Morales es una “base patrulla” que está a 300 kilómetros al norte del Silala, y que tiene como principal misión evitar el contrabando y el tráfico de dogas.

En ese sentido, Insulza sostuvo que vincular la base militar al conflicto por el río que nace en territorio boliviano “es una cosa completamente artificial, más aún cuando Bolivia efectivamente está agrandando la base militar que ellos tienen en el Silala, y que está a un kilómetro y medio de la frontera con Chile”.

Al respecto, el canciller (s) Edgardo Riveros aseguró que “no vamos a reaccionar exclusivamente en relación a anuncios que haga el presidente Morales (…) aquí el que tiene que dar explicaciones en función de los propios dichos que ha emitido, es el presidente Morales y la autoridad boliviana”.

Consultado respecto a si esta nueva acusación cambia en algo la preparación de los alegatos ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, el agente Inzulza enfatizó en que los argumentos de Chile no estarán centrados en este punto, pero no obstante incluirán el cambio en el clima entre ambos países -a su juicio- debido a “la campaña incesante del presidente de Bolivia en este tema”.

Precisamente, el presidente Morales utilizó su cuenta personal en Twitter para referirse al tema, señalando que “Quienes se preocupan por fronteras armadas solo piensan en la guerra”.

Al respecto, Insulza ironizó con el tuiteo indicando que “espero que no quiera guerra, sería un error de su parte”.

“Es mas bien la propaganda (…) la base de su campaña es Bolivia débil y Chile grande y abusador”, sentenció el agente chileno ante La Haya, agregando eso sí que “es preocupante, pero eso no va a cambiar en lo esencial nuestra argumentación que es siempre jurídica”.