A contar de este viernes y durante los cuatro meses de invierno, la Región Metropolitana se encontrará en alerta sanitaria, período denominado por las autoridades como gestión de episodios críticos.

La medida tiene por objetivo reducir las emisiones del contaminante MP 2,5, el más dañino para la población y contempla restricción permanente a vehículos no catalíticos. Durante esta jornada no podrán circular los autos cuyas patentes terminen en 9-0-1 y 2.

Al igual que el año pasado, habrá paralización de fuentes fijas y restricción a catalíticos sólo en caso de emergencia o preemergencia ambiental y la prohibición total del uso de calefacción residencial para equipos no certificados.

Futura restricción a catalíticos

El ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, explicó que la restricción permanente a catalíticos comenzará a regir sólo a partir de 2017.

El 2015 se registraron en Santiago 12 emergencias y preemergencias ambientales, y las autoridades esperan la ocurrencia de una menor cantidad de este tipo de episodios durante el 2016, debido a que se pronostica una mayor cantidad de precipitaciones.

Medidas que según el subsecretario de Salud Pública, Jaime Burrows, permitieron evitar 50 mil enfermedades respiratorias en la capital.

Este viernes regirá la restricción para vehículos no catalíticos con patentes terminadas en 9-0-1 y 2; el lunes 4 de abril, los dígitos serán 3-4-5 y 6; martes 7-8-9 y 0; miercoles 1-2-3-4 y jueves 5-6-7 y 8.