Joseph Blatter, que dijo sentirse “traicionado” y que estimó haber servido de “punching ball” (saco de boxeo), indicó que iba a utilizar todas las vías posibles de recurso, incluida la justicia civil, contra la suspensión de 8 años de toda actividad en el fútbol, dictada este lunes por la justicia interna de la FIFA.

“Vamos a recurrir ante el Comité de Apelación (de la FIFA), luego ante el Tribunal Arbitral del Deporte, luego ante la justicia suiza”, declaró Blatter en una conferencia de prensa, una hora y media después del anuncio público del fallo.

“Como presidente de la FIFA, he servido de punching ball”, añadió, antes de mostrar su tristeza por esta situación: “Lo siento por el fútbol y por la FIFA”.

Blatter mostró también su decepción con la Comisión de Ética de la FIFA, el órgano que determinó su suspensión.

“Si me preguntan si he sido traicionado, sí, lo pienso. Pedimos a la Comisión de Ética que juzgara el comportamiento ético, pero rechazan las pruebas”, estimó.

Sobre Platini, antiguo aliado convertido en enemigo en los últimos años y suspendido igualmente 8 años este lunes, dijo que creía que era “un hombre honrado” y que no guardaba hacia él un deseo de “revancha”.

Además del veredicto de la justicia deportiva, Blatter ha sido imputado por la justicia suiza.

“El ministerio público de la Confederación (MPC) ha tomado nota de la decisión de la FIFA. Esta decisión no tiene influencia en los procedimientos penales dependientes del MPC”, declaró a la AFP Nathalie Guth, portavoz del fiscal general suizo.

Un triste epílogo

Blatter, presidente de la FIFA desde 1998, y Platini, presidente de la UEFA desde 2007, fueron suspendidos 8 años de toda actividad relacionada con el fútbol. La razón: el controvertido pago de 1,8 millones de euros de Blatter a Platini en 2011, supuestamente por un trabajo de asesoría concluido una década antes, sin que mediara contrato escrito.

Los dos hombres, considerados hasta ahora los más poderosos del fútbol mundial, estaban provisionalmente suspendidos hasta principios de enero, a la espera del fallo definitivo, que confirma la sanción ejemplar para ambos.

El largo camino de los recursos podría tener consecuencias más importantes para Platini, que quiere presentarse a las elecciones presidenciales de la FIFA del 26 de febrero y que queda por el momento fuera de la carrera.

Si bien los cargos de corrupción no fueron mantenidos, la justicia interna de la FIFA les consideró culpables de “conflicto de intereses” y de “gestión desleal”. Platini fue castigado además con pagar una multa de 80.000 francos suizos (74.000 euros), más alta que la de Blatter, fijada en 50.000 francos suizos (46.295 euros).

La justicia suiza y la estadounidense están actualmente investigando los escándalos de la FIFA.

Con el veredicto de este lunes, una página de la historia de la FIFA parece pasarse. Blatter entró en la organización en 1975 y fue escalando en la jerarquía, hasta que en 1998 fue elegido presidente, como sucesor del brasileño Joao Havelange.