El consejo nacional de la Democracia Cristiana no logró calmar las aguas al interior de la falange. Esto, porque aún persisten las críticas de un sector de la DC que pide cambios en la conducción política y otro que anticipa un posible quiebre en la Nueva Mayoría tras el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet.

El diputado Fuad Chahín mantuvo su tono crítico a la conducción encabezada por Jorge Pizarro y al rol que está jugado el senador Ignacio Walker como posible carta presidencial de la falange.

Pero este no sería el problema más grave para la Democracia Cristiana. Según el ex ministro del Interior del primer gobierno de Michelle Bachelet, Edmundo Pérez Yoma, el problema más grande de la DC es decidir si sigue o no al interior de la Nueva Mayoría.

Para Pérez Yoma, la permanencia de la Democracia Cristiana, con su actual composición partidaria, es algo que tiene que revisarse en la próxima Junta Nacional que tendrá el partido en el mes de marzo.