El Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago condenó al predicador cristiano Carlos Javier Soto por el delito de injurias con publicidad en contra del dirigente del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual, Rolando Jiménez.

El juicio oral simplificado se inició por una querella que Jiménez, ex presidente del Movilh, presentó contra el autodenominado pastor, quien lo ha acusado de “pedófilo” y “pervertido”.

El Movilh presentó hace cerca de un año una denuncia contra el predicador por haber increpado en forma persistente a su dirigente Rolando Jiménez, persiguiéndolo en eventos públicos y hasta en la sede del movimiento.

A fines de septiembre el juez Ponciano Sallés, del Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, sobreseyó la causa por considerar que las disculpas públicas de Soto habían sido suficientes. El 19 de octubre, la Undécima Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago acogió un recurso en contra de la decisión, iniciándose nuevamente el juicio el viernes 20 de noviembre.

Javier Soto lidera una organización denominada Iglesia Misionera Pentecostés Ríos de Agua Viva, con sede en Viña del Mar, pero la Mesa Ampliada de Iglesias Evangélicas desconoce su calidad de pastor y ha reprochado sus actuaciones públicas.

Tras el procedimiento, el juez Darwin Bratti determinó la culpabilidad de Soto en el delito de injurias con publicidad. La lectura de la sentencia quedó agendada para el viernes 27 de noviembre, según señaló el Poder Judicial a través de su cuenta en Twitter.