Los gendarmes que se desempeñan en el Centro de Justicia adhirieron de forma total al paro nacional, mientras que Carabineros asumió el resguardo de la seguridad.

Por lo que pese a la determinación de los gendarmes no se ha impedido que se realicen los controles de detención en los tribunales de primera instancia.

Además la policía uniformada se ha hecho cargo de acompañar a los detenidos en los procesos judiciales, sobre todo a aquellos que deben permanecer en los calabozos para determinar si sus detenciones fueron ilegales o no y se procede la comunicación de cargos.

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A su vez se impide el paso a la ex penitenciaria de Santiago y en Santiago UNO para nuevos residentes al recinto carcelaria.

La agrupación sostuvo una reunión y esperan la respuesta del Gobierno durante la tarde, donde anunciará las medidas para afrontar la movilización que se inició la medianoche de este lunes.

Cabe recordar que la Asociación Nacional de Suboficiales de Gendarmería inició un paro indefinido para que se concreten una serie de demandas exigidas al Gobierno como el ascenso de los funcionarios al interior de la institución.

Los dirigentes plantean que las policías al perseguir con mayor fuerza la delincuencia, en marco de la agenda antidelincuencia planteada por el Gobierno, generará un aumento de la población penitenciaria, para lo cual Gendarmería no estará preparada, sino hay un refuerzo de funcionarios y un reconocimiento por parte del Ejecutivo, que da cuenta que hay serias carencias al interior de la institución.

Los representantes señalan que para mañana la paralización podría ser nacional, sino hay una respuesta clara de parte del Gobierno y en especial si anuncian durante la tarde una forma de reprimir esta paralización por parte de Gendarmería.