Equipos del Servicio Nacional de Geología y Minería se mantienen desde la semana pasada en la mina Santa Ana de Curanilahue evaluando las condiciones del pique carbonero en el que 70 trabajadores iniciaron una protesta a 600 metros bajo tierra para exigir el pago de sus sueldos y cotizaciones previsionales.

El director nacional del organismo, Rodrigo Álvarez, presenció las mediciones de gases que se hicieron este martes para asegurar que no existe riesgo para la salud de los manifestantes. Los análisis determinaron que el oxígeno se encuentra dentro de parámetros normales.

La ministra de Minería, Aurora Williams, viajó hasta esa zona de la Región del Bío Bío y sostuvo una reunión con personal del Sernageomin para evaluar las condiciones de la mina.

El yacimiento es propiedad de SW Curanilahue S.A., una sociedad anónima cerrada que tiene como representante legal a Miguel Hernández, cercano al empresario televisivo Rodrigo Danús.

Los trabajadores iniciaron el 12 de agosto su protesta y se niegan a abandonar la mina hasta conseguir el pago de los dineros adeudados.

De acuerdo a los antecedentes proporcionados por la Dirección del Trabajo, la empresa registra el no pago de remuneraciones de julio de este año, afectando a las 174 personas que operaban en la mina.