6 personajes del cine que marcaron tendencia en la moda

A Streetcar Named Desire | Warner Bros.
A Streetcar Named Desire | Warner Bros.
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El cine y la moda mantienen un vínculo sagrado. Desde los inicios del primero, el segundo vio en él un soporte de difusión de las nuevas tendencias; y, esta unión fructífera es esencial para delimitar la personalidad y características de los personajes audiovisuales, siendo un puente de identificación para el espectador. El vestuario aporta desde un primer momento credibilidad al personaje y su entorno.

Marcando tendencias constantemente, ¿quién no ha alucinado con alguna película al punto de copiar ciertos elementos del estilo de su personaje favorito? Diferentes prendas han pronunciado un hito a lo largo de la historia cinematográfica, donde en variadas ocasiones tanto el personaje como el actor que lo interpreta se han mimetizado al punto de ser reconocibles como uno solo, ya sea porque aportan de su estilo propio para la construcción de su personaje o el estatus de icono fue tal que el actor quedó eternamente marcado con su interpretación.

A continuación te dejamos con los seis personajes cinematográficos que marcaron tendencia en la moda, que fueron y siguen siendo inspiración para generaciones:

1.- Holly Golightly en Breakfast at Tiffany’s (1961)

Audrey Hepburn fue un icono de estilo gracias a su abultada carrera cinematográfica, entre las que destacan Roman Holiday, My Fair Lady, Sabrina, entre muchas otras. Sin embargo, Breakfast at Tiffany’s fue la película que la transformó en un símbolo de elegancia indiscutido.

Breakfast at Tiffany's | Paramount Pictures

Breakfast at Tiffany's | Paramount Pictures

Con una historia bastante alejada a la historia original de Truman Capote, el personaje de Holly Golightly es una referencia obligada en cuanto a la relación del cine y la moda, donde destaca una escena clave: parada frente al escaparate de Tiffany´s y ataviada con un traje de noche diseñado por Hubert de Givenchy, que fue una reinvención del clásico Petite robe noire, creado en la década los años veinte por otra mujer insigne de la moda, Coco Chanel. El conjunto – que se complementa con perlas, un peinado sobrio y unas grandes gafas de sol- fue el inicio de un símbolo que perdura hasta la actualidad. Siendo imitado hasta el cansancio y usado como fuente de inspiración para muchas. Tal como plantea el blog de moda Viste la Calle, “fue imposible para las mujeres de aquel entonces imitarla”. Audrey Hepburn quedaría inmortalizada en la retina de los espectadores para siempre.

2.- Rick Blaine en Casablanca (1942)

Los personajes masculinos también fueron una fuerte influencia en el mundo de la moda, sobre todo los que personificaba Humphrey Bogart. Pero fue la pieza estrenada en 1942 que marcaría al actor y popularizaría a la gabardina, esa prenda de vestir impermeable perfecta para los días de lluvia. La agencia de noticias Europa Press, Chance, recuerda que la gabardina antes de Casablanca, era sólo utilizada como uniforme militar.

Casablanca | Warner Bros

Casablanca | Warner Bros


Diseñada por la casa de moda británica, Burberry, este atuendo fue confeccionado para otorgar una prenda impermeable y resistente a los trabajadores del área rural y que luego se masificaría con la llegada de la Primera Guerra Mundial. Gracias a Rick Blaine y Humphrey Bogart la gabardina se volvería de uso común, siendo una distinción de elegancia entre todos los hombres del mundo.

3.- Séverine Serizy en Belle de Jour (1967)

Esta película francesa del director Luis Buñuel, inmortalizaría a Catherine Denueve gracias a su colaboración con el diseñador Yves Saint Laurent. A este último, se le encargó el vestuario de la actriz para personificar a Séverine Serizy, ama de casa que vive una existencia plana y sin sobresaltos, pero que mantiene una vida sexual secreta.

El estilo de Séverine y de Catherine marcaría una época y un aire parisino inconfundible. La revista Vogue posiciona a Catherine Denueve como “la gran dama del cine francés” y en el mismo artículo la modelo y diseñadora de moda, Inès de la Fressange, la define como diosa terrenal.

Los abrigos de doble botonadura, vestidos con cuello, maquillaje con un delineado tipo “ojos de gato” y ese peinado casual pero inconfundible, marcarían la década de los sesenta y sería referencia obligada para la moda.

Belle de Jour | Distribuición extranjera

Belle de Jour | Distribuición extranjera

4.- Lisa Carol en Rear Window (1954)

Alfred Hitchcock, director del filme, solía tener una relación especial con las protagonistas de sus películas, a las cuales ensalzaba a la categoría de musas magnánimas. Grace Kelly fue una de ellas, representante indiscutible del New Look, el cual crearía Christian Dior en 1947 como una antítesis de la sobriedad de los años de postguerra.

Los abultados vestidos, accesorios refinados y un peinado permanentemente de peluquería serían la personificación de la elegancia en los años cincuenta, en parte popularizado por los personajes de Grace Kelly en Rear Window y To Catch a Thief ambas películas dirigidas por Alfred Hitchcok. La futura princesa de Mónaco fue un estandarte de la refinación en los años cincuenta y uno de los mitos eternos de la moda.

Rear Window

Rear Window

5.- Stanley Kowalski en A Streetcar Named Desire (1951).

Era 1947 y Marlon Brando triunfaba en Broadway en el rol que luego protagonizaría nuevamente cuatro años más tarde junto a Vivian Leigh, la misma que inmortalizaría la moda como una declaración de principios con su personaje de Scarlett O´Hara en Gone with the Wind. Imposible no recordar ese fastuoso vestido verde de terciopelo que confeccionó a partir de unas cortinas, lo cual no parecía improbable para un personaje del garbo de O´Hara.

Pero, volviendo a Marlon Brando, su personificación de Stanley Kowalsky lo marcó como el mito de la masculinidad, aunque a él lo cansara hasta el hartazgo.

La camiseta blanca, se volvería un hito con doble sentido. Por un lado, popularizaría el aspecto desaliñado y juvenil que luego marcaría la carrera de Jamen Dean, gracias a su estilo combinado de jeans, camisetas blancas, chaqueta a medio cerrar y botas desgastadas, prendas que eran impensadas para la elegancia masculina de Hollywood. Por otro lado, sería sinónimo del estereotipo del hombre maltratador e incorregible.

A Streetcar Named Desire | Wikipedia

A Streetcar Named Desire | Wikipedia

6.- Annie Hall en Annie Hall (1977)

Diane Keaton marcó un antes y un después con su estilo totalmente andrógino, el cual se diferenció por su originalidad. Pantalones de color caqui, anchos y sin una forma que se diferenciara hasta ese entonces por ser femenina, camisas de hombres, corbatas, sombreros, gafas enormes, camisetas a rayas y un sinfín de elementos más, marcaron la moda cuando Annie Hall se estrenó.

El sitio Trendencias, cita que fue la propia Diane Keaton que configuró el diseño de vestuario de su personaje, donde también aportaron referentes de la moda como el diseñador Ralph Lauren.

Lo casual, bohemio y alternativo se juntan para dar forma a este icono cultural, ampliamente imitado y enaltecido como referente de la moda.

Annie Hall

Annie Hall

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El cine y la moda mantienen un vínculo sagrado. Desde los inicios del primero, el segundo vio en él un soporte de difusión de las nuevas tendencias; y, esta unión fructífera es esencial para delimitar la personalidad y características de los personajes audiovisuales, siendo un puente de identificación para el espectador. El vestuario aporta desde un primer momento credibilidad al personaje y su entorno.

Marcando tendencias constantemente, ¿quién no ha alucinado con alguna película al punto de copiar ciertos elementos del estilo de su personaje favorito? Diferentes prendas han pronunciado un hito a lo largo de la historia cinematográfica, donde en variadas ocasiones tanto el personaje como el actor que lo interpreta se han mimetizado al punto de ser reconocibles como uno solo, ya sea porque aportan de su estilo propio para la construcción de su personaje o el estatus de icono fue tal que el actor quedó eternamente marcado con su interpretación.

A continuación te dejamos con los seis personajes cinematográficos que marcaron tendencia en la moda, que fueron y siguen siendo inspiración para generaciones:

1.- Holly Golightly en Breakfast at Tiffany’s (1961)

Audrey Hepburn fue un icono de estilo gracias a su abultada carrera cinematográfica, entre las que destacan Roman Holiday, My Fair Lady, Sabrina, entre muchas otras. Sin embargo, Breakfast at Tiffany’s fue la película que la transformó en un símbolo de elegancia indiscutido.

Breakfast at Tiffany's | Paramount Pictures

Breakfast at Tiffany's | Paramount Pictures

Con una historia bastante alejada a la historia original de Truman Capote, el personaje de Holly Golightly es una referencia obligada en cuanto a la relación del cine y la moda, donde destaca una escena clave: parada frente al escaparate de Tiffany´s y ataviada con un traje de noche diseñado por Hubert de Givenchy, que fue una reinvención del clásico Petite robe noire, creado en la década los años veinte por otra mujer insigne de la moda, Coco Chanel. El conjunto – que se complementa con perlas, un peinado sobrio y unas grandes gafas de sol- fue el inicio de un símbolo que perdura hasta la actualidad. Siendo imitado hasta el cansancio y usado como fuente de inspiración para muchas. Tal como plantea el blog de moda Viste la Calle, “fue imposible para las mujeres de aquel entonces imitarla”. Audrey Hepburn quedaría inmortalizada en la retina de los espectadores para siempre.

2.- Rick Blaine en Casablanca (1942)

Los personajes masculinos también fueron una fuerte influencia en el mundo de la moda, sobre todo los que personificaba Humphrey Bogart. Pero fue la pieza estrenada en 1942 que marcaría al actor y popularizaría a la gabardina, esa prenda de vestir impermeable perfecta para los días de lluvia. La agencia de noticias Europa Press, Chance, recuerda que la gabardina antes de Casablanca, era sólo utilizada como uniforme militar.

Casablanca | Warner Bros

Casablanca | Warner Bros


Diseñada por la casa de moda británica, Burberry, este atuendo fue confeccionado para otorgar una prenda impermeable y resistente a los trabajadores del área rural y que luego se masificaría con la llegada de la Primera Guerra Mundial. Gracias a Rick Blaine y Humphrey Bogart la gabardina se volvería de uso común, siendo una distinción de elegancia entre todos los hombres del mundo.

3.- Séverine Serizy en Belle de Jour (1967)

Esta película francesa del director Luis Buñuel, inmortalizaría a Catherine Denueve gracias a su colaboración con el diseñador Yves Saint Laurent. A este último, se le encargó el vestuario de la actriz para personificar a Séverine Serizy, ama de casa que vive una existencia plana y sin sobresaltos, pero que mantiene una vida sexual secreta.

El estilo de Séverine y de Catherine marcaría una época y un aire parisino inconfundible. La revista Vogue posiciona a Catherine Denueve como “la gran dama del cine francés” y en el mismo artículo la modelo y diseñadora de moda, Inès de la Fressange, la define como diosa terrenal.

Los abrigos de doble botonadura, vestidos con cuello, maquillaje con un delineado tipo “ojos de gato” y ese peinado casual pero inconfundible, marcarían la década de los sesenta y sería referencia obligada para la moda.

Belle de Jour | Distribuición extranjera

Belle de Jour | Distribuición extranjera

4.- Lisa Carol en Rear Window (1954)

Alfred Hitchcock, director del filme, solía tener una relación especial con las protagonistas de sus películas, a las cuales ensalzaba a la categoría de musas magnánimas. Grace Kelly fue una de ellas, representante indiscutible del New Look, el cual crearía Christian Dior en 1947 como una antítesis de la sobriedad de los años de postguerra.

Los abultados vestidos, accesorios refinados y un peinado permanentemente de peluquería serían la personificación de la elegancia en los años cincuenta, en parte popularizado por los personajes de Grace Kelly en Rear Window y To Catch a Thief ambas películas dirigidas por Alfred Hitchcok. La futura princesa de Mónaco fue un estandarte de la refinación en los años cincuenta y uno de los mitos eternos de la moda.

Rear Window

Rear Window

5.- Stanley Kowalski en A Streetcar Named Desire (1951).

Era 1947 y Marlon Brando triunfaba en Broadway en el rol que luego protagonizaría nuevamente cuatro años más tarde junto a Vivian Leigh, la misma que inmortalizaría la moda como una declaración de principios con su personaje de Scarlett O´Hara en Gone with the Wind. Imposible no recordar ese fastuoso vestido verde de terciopelo que confeccionó a partir de unas cortinas, lo cual no parecía improbable para un personaje del garbo de O´Hara.

Pero, volviendo a Marlon Brando, su personificación de Stanley Kowalsky lo marcó como el mito de la masculinidad, aunque a él lo cansara hasta el hartazgo.

La camiseta blanca, se volvería un hito con doble sentido. Por un lado, popularizaría el aspecto desaliñado y juvenil que luego marcaría la carrera de Jamen Dean, gracias a su estilo combinado de jeans, camisetas blancas, chaqueta a medio cerrar y botas desgastadas, prendas que eran impensadas para la elegancia masculina de Hollywood. Por otro lado, sería sinónimo del estereotipo del hombre maltratador e incorregible.

A Streetcar Named Desire | Wikipedia

A Streetcar Named Desire | Wikipedia

6.- Annie Hall en Annie Hall (1977)

Diane Keaton marcó un antes y un después con su estilo totalmente andrógino, el cual se diferenció por su originalidad. Pantalones de color caqui, anchos y sin una forma que se diferenciara hasta ese entonces por ser femenina, camisas de hombres, corbatas, sombreros, gafas enormes, camisetas a rayas y un sinfín de elementos más, marcaron la moda cuando Annie Hall se estrenó.

El sitio Trendencias, cita que fue la propia Diane Keaton que configuró el diseño de vestuario de su personaje, donde también aportaron referentes de la moda como el diseñador Ralph Lauren.

Lo casual, bohemio y alternativo se juntan para dar forma a este icono cultural, ampliamente imitado y enaltecido como referente de la moda.

Annie Hall

Annie Hall