Aunque la mediocridad no es un término en sí peyorativo, pues hace alusión al “promedio”, la mayoría de las personas no quieren ser consideradas de tal modo por su connotación negativa. Y es que este término da cuenta de alguien que no se esfuerza lo suficiente para ser “sobresaliente” y se conforma con el status quo.

“Las personas que se encuentran en el ‘promedio’ de sus grupos de pertenencia, suelen mostrar algunas características comunes”, afirma el coach Oscar Cáceres, creador del plan Extraordinary People Model y conocido speaker internacional, quien señala que existen algunas conductas o actitudes de las personas “mediocres” que es posible detectar.

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Lo bueno, según Cáceres, es que al reconocer estas características se puede hacer algo al respecto, para “desmarcarse de los espacios de mediocridad que tantas limitaciones nos generan y sobre todo entender que podemos ser capaces de lograr aquello que deseamos”.

A continuación te indicamos las características de las personas mediocres, según Cáceres.

1- Viven en un mundo de negativismo autodestructivo y se han propuesto consciente o inconscientemente, contaminar la vida de los demás.

2- Actúan en la vida tomando decisiones con el propósito (normalmente inconsciente) de agradar al resto, por temor a perder el afecto de las personas que les rodean.

3- Actúan en la vida sin un foco mental claro, viviendo con la ilusión de que lo importante es sólo el ahora y por lo tanto, se comportan de manera dispersa en sus asuntos relevantes.

4- Recurren permanentemente a las excusas para explicar los “fracasos”, sin hacerse cargo de la responsabilidad por los resultados que cada uno genera en la vida.

5- Tienen el hábito de “escanear” lo negativo de situaciones y personas, generando ceguera frente a lo positivo de la vida y de la gente con la cual interactúan.

6- Se quejan literalmente por todo. Sienten que la vida les juega permanentemente malas pasadas y que tienen una especie de “halo de mala suerte”. Victimismo sutil.

7- No se involucran en lo que hacen ni en las interacciones que tienen. En sus trabajos hacen lo justo y necesario, no se esfuerzan ni un milímetro adicional por hacerlo con entusiasmo y mejor. Con las personas, no generan escucha ni conexión emocional.

8- Sienten que el mundo está en deuda con ellos, que la vida es injusta y por lo tanto, están permanentemente esperando la ayuda de los demás para resolver “sus problemas”.

9- Sienten que la vida no les otorga oportunidades, que hay gente más talentosa que ellos y creen que éstos han sido premiados de manera especial sin merecerlo, lo que en ellos genera un gran resentimiento.

10- Sienten envidia por el éxito de los demás. cuando alguien les cuenta de sus proyecto o ideas, esconden un secreto deseo de que esas ideas fracasen. no soportan el éxito ajeno y sufren por eso.

“Probablemente la lista sea más larga, sin embargo, creo que este listado es una buena aproximación a entender el porqué, gran parte de la población en el mundo viven en una mediocridad asfixiante que nos nubla y nos impide saborear los placeres de una vida plena de grandeza”, comenta el coach.