Al menos una persona murió y 6 resultaron heridas el sábado en Copenhague en dos ataques a bala, uno contra un centro donde se debatía sobre islamismo y libertad de expresión, con el autor de las caricaturas de Mahoma, y otro cerca de una sinagoga.

La policía no estableció formalmente un vínculo entre ambos tiroteos, el primero ocurrido en la tarde del sábado y el segundo en la noche. En ambos, el autor logró huir.

En el centro cultural Krudttonden, un hombre de 40 años murió y tres policías resultaron heridos poco antes de las 15H00 GMT, indicaron las autoridades en un comunicado.

En el debate participaba el embajador de Francia, François Zimeray, quien se encontraba allí con el autor de las caricaturas de Mahoma, Lars Vilks.

Estos ataques se producen después de que el mes pasado dos atentados dejaran 17 muertos en París.

En la noche del sábado para el domingo, tres personas fueron heridas a bala cerca de una sinagoga en Copenhague informó la policía, precisando que una víctima fue alcanzada en la cabeza, mientras que dos agentes recibieron impactos en las extremidades.

Con respecto al primer ataque, la policía habló inicialmente al terminar la tarde que buscaba a dos hombres que huyeron a bordo de un Volkswagen Polo, cuyo número de matrícula dio a conocer.

El vehículo vacío fue encontrado horas más tarde, cerca del lugar del ataque y de una estación.

“Dinamarca sufrió hoy (sábado) un acto de violencia cínico. Todo indica que el tiroteo fue un atentado político y por lo tanto un acto terrorista”, declaró en un comunicado la primera ministra danesa, Helle Thorning-Schmidt.

Solidaridad

Después del primer ataque, las fuerzas del orden indicaron que “los primeros testimonios indican que solo hubo un autor” de los disparos. La policía difundió una foto, aparentemente tomada en un estacionamiento, con datos de que el hombre llevaba una chaqueta de abrigo y una gorra, tiene de 25 a 30 años, es atlético y de 1,85 m de estatura.

El presidente francés François Hollande expresó a la primera ministra danesa “toda la solidaridad de Francia”.

El ministro francés de Relaciones Exteriores, Laurent Fabius, condenó poco después “con la mayor firmeza” el “ataque terrorista” en Copenhague.

“Un ataque terrorista tuvo como objetivo una reunión pública en Copenhague, donde participaba el embajador de Francia en Dinamarca. Condeno con la mayor firmeza este atentado. Francia está del lado de las autoridades y del pueblo danés en la lucha contra el terrorismo”, declaró el ministro en un comunicado.

El ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, condenó el sábado en Lima el atentado.

“Condeno rotundamente el atentado en Copenhague”, dijo Steinmeier al inicio de una conferencia de prensa conjunta con su par peruano Gonzalo Gutiérrez ,en el marco de una visita a la región que incluye a Brasil y Colombia.

La sombra de Charlie Hebdo

“Nos dispararon desde el exterior. Tenían la misma intención que (en el ataque a) Charlie Hebdo, pero no pudieron entrar”, declaró a la AFP el embajador, contactado cuando se encontraba todavía en el interior, refiriéndose al atentado del mes pasado en París contra el semanario satírico francés.

“Intuitivamente diría que hubo al menos 50 disparos, y los policías aquí nos dicen 200. Las balas pasaron a través de las puertas y todo el mundo se lanzó a tierra”, dijo.

“Logramos huir de la sala, y ahora seguimos en el interior pues todavía la situación es crítica. Los asaltantes no fueron atrapados, pueden seguir en la zona”, añadió Zimeray.

Lars Vilks, artista sueco, es conocido por haber publicado en 2007 caricaturas donde se ridiculiza al profeta Mahoma. Vive bajo protección policial desde entonces.

Varias decenas de personas asistían al debate, bajo protección policíaca.

Las televisiones danesas mostraban los vidrios del centro cultural acribillados de balas.

El 7 de enero, dos islamistas irrumpieron en los locales en París de la revista satírica Charlie Hebdo, matando a 12 personas, entre ellas importantes caricaturistas franceses, un ataque seguido de un atentado contra un supermercado judío.

CNN

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