El sueño sigue siendo lograr estudiar, recorrer un camino de aproximadamente 20 años, desde el abecedario hasta la especialización profesional o técnica. Para la mayoría la vida intelectual avanza de este modo, paso a paso. Bajo un desarrollo escolar meticuloso el individuo va desde la suma a la construcción de puentes, de sembrar un poroto a la cirugía de organismos vivos.
Pero la mayoría no es el todo. El pasado mes de noviembre, en Inglaterra, se conoció el caso de Ayan Qureshi, un niño de 6 años catalogado como un genio de la informática. El pequeño, de origen paquistaní, residente en Londres, se convirtió en el instalador certificado de Windows más joven del mundo. Aquello, tras superar las mismas pruebas que el resto de los postulantes que buscan dedicarse de manera profesional a dicho sistema operativo. El joven genio logró 700 de los 1.000 puntos posibles.
Ayan Qureshi | mirror.co.uk
En el caso de Qureshi, junto a su gran interés por los ordenadores, se suma el hecho de pasar dos horas diarias junto a su padre en un improvisado taller de reparaciones informáticas, donde pudo desarrollar de buen modo su aprendizaje y su carácter autodidacta. Sin perjuicio de todo lo anterior, el padre de Ayan, contento con el logro, enfatizó que lo que espera de su hijo es que continúe con sus obligaciones escolares y que no ejerza la certificación recién adquirida.
El camino corto
Ayan es representativo de nuevos tiempos y opciones que, sin embargo, parecieran estar destinadas a superdotados. Se trata de un grupo de niños que han logrado en pocos años lo que muchos esperan como plan de vida.
Akrit Jaswal, es un joven de Nurpur, India, que en el 2000, teniendo sólo 7 años, realizó su primera intervención quirúrgica. Esa vez operó a una niña de ocho años que tenía algunos dedos de la mano fundidos por una grave quemadura. Tras conocerse su caso, unos años después una prestigiosa universidad india le ofreció los estudios de medicina, convirtiéndose en el universitario más joven de su país y también en el más inteligente, con un coeficiente intelectual estimado en 146. Hoy Akrit ha recorrido todo el mundo dando charlas sobre sus intenciones de descubrir la cura al cáncer y el sida.
http://youtu.be/4kr6ceTsjjg
Nick D’Aloisio vendió en 30 millones de dólares al gigante Yahoo! una aplicación de Iphone de búsqueda y selección de noticias. La app se llamaba Summly y el negocio se realizó cuando Nick apenas tenía 17 años. Antes de eso, a los 15 años, ya había sido la persona más joven del mundo en recibir una inversión de capital de 300 mil dólares que la compañía Horizont.
http://youtu.be/xn19IPLALSk
Robert Nay inventó el juego que desplazó a Angry birds del primer lugar de los ranking. Se trata de Bubble Ball que ya tiene más de 17 millones de descargas, y gran parte de ellas son de su versión de pago. Robert hoy trabaja junto a la compañía de desarrollo de videojuegos Corona Bay y recibe, además, pago por todo el avisaje que se incluye en sus creaciones.
Onelifesucces.net
Gregory Smith aprendió a leer a los 2 años, cuando el resto recién comienza a caminar. Tenía 10 años en 1999, cuando recibió una beca completa para estudiar en el Randolph-Macon College. Allí estudió Bachillerato en Ciencias y Matemáticas y se graduó con honores. Al día de hoy ya ha sido nominado 4 veces al Premio Nobel de la Paz por su ardua labor a través del mundo dando charlas y exposiciones sobre la importancia de los derechos de los niños. Es esta última labor la que le ha dado trabajo en diversas instituciones y ONGs.
Gregory Smith
Estos son sólo 5 casos de niños genios, en diversas áreas, que han hecho de sus cortas vidas un camino breve e intenso hacia el logro de metas o acciones significativas.
