Científicos australianos pusieron a punto un suero que mejora las posibilidades de supervivencia de los soldados gravemente heridos en el campo de batalla, anunció el miércoles Geoffrey Dobson, de la Universidad James Cook.

Ese suero de supervivencia, que utiliza una droga llamada “adenocaína” (combinación de lidocaína, adenosina y magnesio), aumenta las posibilidades de sobrevivencia aumentando la tensión arterial de las víctimas en los primeros minutos consecutivos a la herida.

El “87% de las muertes ocurren en los 30 primeros minutos consecutivos a la herida, antes de que los soldados puedan llegar a un hospital de campaña”, explicó Dobson, que puso a punto el suero junto a su socio Hayley Letson.

“Alrededor del 25% de las víctimas podrían sobrevivir potencialmente”, si los ensayos clínicos confirman su eficacia, agregó Dobson.

La tensión de los heridos no debe ser ni demasiado alta ni demasiado baja para evitar los riesgos de pérdida suplementaria de sangre, explicó.

El interés del tratamiento reside en que la dosis de suero necesaria para estabilizar la tensión es ínfima y tiene efecto en un segundo, agregó.

El tratamiento fue probado en ratas y cerdos, dijeron los investigadores, que señalaron que el ejército estadounidense va a proceder a ensayos clínicos.