El presidente chipriota, Nikos Anastasiadis, tuvo que ser hospitalizado brevemente este jueves tras una subida de tensión a su llegada a Bruselas para participar en una cumbre de la Unión Europea, indicó el gobierno a través de un comunicado.

El jefe de Estado chipriota, de 68 años, pudo abandonar el hospital horas más tarde, tras recibir los cuidados necesarios. Sin embargo, los médicos le recomendaron guardar cama en su hotel y someterse a un seguimiento médico, indicó el portavoz del gobierno, Nikos Christodulidis.

En la cumbre de la UE, Anastasiadis debía condenar la presencia de barcos turcos, entre ellos una embarcación para sondear los fondos marinos en su zona económica exclusiva, al sureste de la isla, no muy lejos de donde el consorcio italocoreano ENI-Kogas lleva a cabo prospecciones para descubrir eventuales bolsas de gas, en base a un acuerdo con la República de Chipre.

En reacción a la incursión turca, la República de Chipre, miembro de la UE, dijo que bloquearía la apertura de nuevos capítulos en las negociaciones de adhesión de Turquía a la UE.

El envío de barcos turcos obligó a Nicosia a retirarse de las negociaciones de paz, supervisadas por Naciones Unidas, para reunificar esta isla partida en dos desde 1974 y cuya parte norte, la República Turca del Norte de Chipre, sólo reconoce Ankara.

Las autoridades turcas se oponen a cualquier prospección gasística o petrolífera por el gobierno chipriota-griego antes de un acuerdo de paz, al reclamar que los chipriotas-turcos no se benefician de esta riqueza.