Según datos de la Encuesta Nacional de Consumo Alimentario, realizada durante los años 2010-2011, el 10% de los chilenos no toma desayuno, cifra que se incrementa cada día más en nuestra sociedad, debido a la falta de tiempo, el transporte y los cambios de hábitos. El académico de Nutrición de la Universidad Andrés Bello, Camilo Aburto, expresó que esa comida es esencial para “activar los procesos metabólicos del organismo y restituir las reservas de glucosa”.

“Es importante saber que no tomar desayuno es un hábito poco saludable para nuestro organismo, ya que este sigue siendo considerado la comida más importante del día”, dijo Aburto, académico de la Escuela de Nutrición y Dietética de esa universidad.

Agregó que dentro de las ventajas de tomar desayuno, está la mejora en el rendimiento físico e intelectual, mejorando la concentración y productividad; y ayuda a mantener un peso corporal normal, reduciendo la posibilidad de presentar enfermedades cardiovasculares.

“Estudios publicados por el Departamento de Nutrición de la Universidad Harvard señalan que no tomar desayuno aumenta en 27% riesgo de enfermedad coronaria. Se expresa que saltarse el desayuno puede conducir a uno o más factores de riesgo, como la obesidad, presión arterial alta, el colesterol alto y la diabetes, que a su vez puede conducir a un ataque al corazón en el tiempo”, subrayó el académico.

Dijo que “en la misma publicación, se destacaba que los jóvenes que tomaban desayuno regularmente tenían menor contenido de grasa corporal, mostraban una mayor capacidad cardio respiratoria y un perfil cardiovascular más saludable que aquellos que no lo hacían”.

Añadió que en niños, el asunto no varía, y que “de acuerdo a publicaciones en la Universidad Nacional de San Luis, Argentina, se determinó que los pequeños que no desayunan, tienen un estado nutricional disminuido con respecto a los que sí desayunan. Probablemente porque los que no reciben el desayuno en sus casas tienen falencias en el resto de las comidas, situación que, en conjunto, provoca estados nutricionales deficientes jóvenes”.