La aviación del régimen sirio bombardeó este jueves una zona libanesa fronteriza y dejó 25 heridos, pocas horas después de atacar Arsal, ciudad libia mayoritariamente sunita que apoya la rebelión siria, según fuentes de seguridad libias.

El ejército sirio, apoyado por el Hezbolá libanés, está lanzando repetidas ofensivas del lado sirio de la frontera, lo que ha provocado un éxodo de rebeldes y civiles sirios hacia Líbano.

Fuentes de seguridad en el norte de Líbano precisaron que varias casas fueron dañadas y que 25 personas resultaron heridas en este nuevo bombardeo, sin poder precisar si eran libias o sirias.

El ejército sirio ya tomó el miércoles en su territorio la localidad de Al Hosn, donde se encuentra la célebre fortaleza del Krak de los Caballeros, de la época de las Cruzadas, en la provincia central de Homs.

Once rebeldes sirios que huían de esa fortaleza murieron en los combates, según fuentes militares.

“La situación está muy mal. En coordinación con la Cruz Roja libanesa hemos transportado 40 heridos” de Al Hosn hacia Líbano, indicó el jueves un médico de la localidad de Wadi Jaled, que sufrió los ataques de los aviones sirios.

Según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH), al menos 60 personas murieron o resultaron heridas en los últimos días en su huida de Al Hosn hacia Líbano.